El mes de septiembre es ideal para hacerse a la mar. Eso si no se desata una dichosa DANA. Salen días tan espectaculares como el de hoy. En la Falzia, tramo que está entre la playa del Portitxol o la Barraca y el Cap Negre, el agua mostraba un intenso color turquesa. Estaba tan calma y clara que se transparentaban los fondos de posidonia oceánica. Además, este litoral se ha liberado ahora de la presión náutica de un verano en el que cientos de navegantes han puesto proa hacia Xàbia. Las embarcaciones que este mediodía se hallaban en la Falzia no habían tirado el ancla (daña la posidonia). Permanecían amarradas a las boyas de fondeo. Sus tripulaciones disfrutaban de un mar que asemejaba un espejo. Y que despedía destellos azules y esmeralda.