Hay que tener buenos cimientos para aguantar todo el peso de la justicia. El Palau de Justícia de Dénia, inaugurado en noviembre del año 2000, ya ha dado algunos signos de fragilidad. Pero lo de ayer fue el no va más. Parte del edificio se estremeció (también el centenar de funcionarios que trabaja allí). Poco después de las 13 horas, se resquebrajó un tramo del suelo de la segunda planta. Las baldosas de las dependencias donde está la Fiscalía se levantaron. Algunas se partieron. La jueza decana, Marisa Fayos, ordenó desalojar inmediatamente los juzgados. Los juicios y otros procedimientos que se estaban llevando a cabo se suspendieron. Este edificio alberga nueve juzgados, la Fiscalía y el Registro Civil.

La magistrada avisó a la conselleria de Justicia. Mientras, los bomberos y el arquitecto municipal de Dénia realizaron una primera inspección.

Parecía que un terremoto había fracturado las baldosas. Pero no hay constancia de actividad sísmica en la zona. Los técnicos de la conselleria descartaron en la primera inspección que el edificio sufriera problemas estructurales. No obstante, los jueces advirtieron de que hasta que no se les entregara un informe técnico por escrito que descarte el riesgo de derrumbe y los posibles fallos en la cimentación no iban a reanudar la actividad. Anoche la conselleria les entregó ese informe.

Sobre un centenar de trabajadores de los juzgados y el registro civil fueron desalojados. | LEVANTE-EMV

A primera hora de ayer, el edificio abrió sus puertas con normalidad. El personal había encontrado algunas baldosas levantadas. Pero aquí están acostumbrados a que de tanto en tanto surja alguna grieta o se dé algún signo de deterioro. Fue poco después de las 13 horas cuando se escuchó un crujido, un estruendo y, en algunas dependencias, los trabajadores notaron que el suelo se movía. El susto fue de aúpa.

«Salíamos de celebrar juicios y, prácticamente, nos han sacado en volandas», aseguraron fuentes del Palau de Justícia. Los dos detenidos que estaban en los calabozos esperando para declarar tuvieron también que ser evacuados.

Desde el sindicato UGT se reclamó a la Dirección General de Justicia que el edificio siga vacío mientras no se garantice la completa seguridad de los trabajadores. UGT consideró que era básico para garantizar la tranquilidad de los empleados, unos cien, que los técnicos redactaran un informe. Ese dictamen estaba listo anoche y, por tanto, la actividad se reanudará hoy en los juzgados que cada día registran, además, gran trajín de vecinos que acuden a juicios, trámites y al registro.