La indignación de la hostelería es atronadora. Sin los bares y restaurantes, la Marina Alta colapsa. Es un sector esencial en su economía. Esta mañana los hosteleros han llevado su enfado a la calle. Una caravana de más de 200 coches ha colapsado Dénia. Los hosteleros han hecho sonar los cláxones. Portaban en sus coches pancartas que alertan del momento crítico que vive el sector, al que se ha obligado en la Comunitat a bajar la persiana. "Estamos desesperados. Y seguimos pensando que, a pesar de todo, la hostelería no es un foco de contagio. La hostelería responsable puede incluso solucionar problemas. Pero pagamos el pato. Hay comunidades que han mantenido abiertos los bares y restaurantes y que tienen los mismos contagios", ha afirmado la presidenta de la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de la Marina Alta (Aehtma), Cristina Sellés.
Doscientos coches circulando a una por las calles de Dénia ocasionan, claro está, colapso. Así este sector hace visible su indignación. Y sin la hostelería, lo que colapsa es la economía de la turística Marina Alta.
"Apenas han llegado ayudas. Así no podemos sobrevivir. Además, la vacunación va lenta. Necesitamos que lleguen vacunas, porque el destino que más haya vacunado será el luego el más competitivo", ha advertido Sellés.
La presidenta de los hosteleros ha afirmado que hay que frotarse los ojos ante una realidad que nunca se esperaba, la de los bares y restaurantes cerrados. "Nunca pensábamos que esto podía pasar".
También ha expresado lo decepcionado que está el sector con los políticos. "Estamos hartos de escucharles decir que funciona la colaboración público privada y ahora, en un momento tan crítico, se ve claro que no es así".
A la protesta se han unido sectores que también viven de la hostelería, como el de los proveedores. También han acudido asociaciones de Teulada-Moraira o de Xàbia. Los bares y restaurantes mueven la Marina Alta. Hoy tocaba colapsar Dénia.
