El Institut de Recerca Oceanogràfica de Xàbia (IROX) ha presentado una nueva denuncia por el vertido de escombros en un acantilado próximo a la cala de la Granadella. No es ni la primera, ni la segunda, ni la tercera denuncia. Es ya la cuarta. La primera la interpuso esta entidad científica y conservacionista hace cuatro años y medio. Ahora subraya que la senda de la pesquera de Encots, sepultada con los vertidos arrojados desde las obras de los chalés de lujo de los acantilados, «está peor» y hay «más escombros y restos vegetales tirados sin control».

El IROX califica de «atentado inaceptable» los vertidos en este litoral. Lamenta la «ineficacia» de las tres administraciones que deben salvaguardar un litoral protegido y que forma parte del LIC Penya-segats de la Marina. Esas administraciones son Costas, es decir, el ministerio para la Transición Ecológica, la conselleria de Medio Ambiente y el ayuntamiento.