Del barrio del carmen a moraira. La fotografía gigante de la vedette valenciana Rosita Amores emergiendo de una paella como la Venus de Botticelli, que nacía de una concha, ha viajado unos cuantos kilómetros. Su autor, Luis Montolio, la colocó ayer en la pared de una finca de Moraira. Rosita Amores mira al mar y concita ya todas las miradas. Es una imagen icónica. Montolio explicó que antes de la pandemia se desprendió de la pared del Carmen de València. «Ha sido una suerte que no acabara en ‘ebay’», dijo. El autor la recuperó y ahora Rosita seduce a los vecinos y turistas de Moraira.