El civismo se ha ido de vacaciones. Durante la primera quincena de agosto, el servicio de limpieza de las playas de Dénia ha recogido basura por un tubo. Nunca se había recogido tanto, nada menos que 15.300 kilos.

Y de todo e incluso colchones que han acabado en las playas. Los operarios han retirado sillas y cachivaches de playa abandonados. Algunos bañistas los colocaban en la orilla de la playa para reservarse el sitio, lo que está prohibido. También han recogido restos de botellones (botellas, plásticos y bolsas) y enseres domésticos como muebles, colchones y mobiliario de terraza. También se han retirado bolsas de basura que los incívicos tiran en las papeleras de las playa, en los contenedores reservados para la posidonia oceánica e incluso en la arena.

Basura, incluidas bolsas de residuos domésticos, retirada con una pala en una playa dianense Levante-EMV

Entre el 1 y el 15 de agosto del pasado año, se recogieron 12.930 kilos de basura en las playas. En la primera quincena de agosto de 2019, antes de la pandemia, los operarios se llevaron 13.969 kilos.

Ahora esas cifras se han superado ampliamente. Hay más turistas, es cierto. Y también hay más incívicos.

El ayuntamiento ha hecho un llamamiento a la responsabilidad y a respetar un lugar de tanta belleza y valor natural como es el litoral dianense.

Un colchón tirado en una playa de Dénia Levante-EMV