Un atraco a plena luz del día y en el centro de Pego. Dos delincuentes irrumpieron ayer poco antes de las 13 horas en la pescadería A. Viciano, que está en la céntrica calle Sant Jaume. Imposible distinguirles los rasgos. Llevaban la cara cubierta con la mascarilla (hoy en día es fácil ir embozado por la calle) y portaban también gorro y capucha. No se les veían más que los ojos.

La pescadera y una clienta se quedaron estupefactas. Uno de los atracadores sacó una escopeta recortada y las amenazó. Empezó a gritar y a exigirles que les dieran todo el dinero. Llegó a empujar a la clienta.

Fue un atraco relámpago. Los atracadores cogieron un manojo de billetes y de otros papeles (incluso facturas) y salieron a escape. Se llevaron 200 euros. La pescadera avisó de inmediato a la Policía Local. Guardia Civil y Policía Local han abierto una investigación para dar con los delicuentes.

Fuentes policiales han indicado que estos hechos no son nada usuales en Pego. Han precisado que las escopetas recortadas se utilizan para perpetrar delitos y no son armas de caza. También han señalado que la tarde-noche anterior los vecinos ya avisaron de que había dos sospechosos merodeando por esta zona. Los agentes de la Policía Local acudieron pero los sospechosos se habían esfumado.

La pescadera y la clienta, según las mismas fuentes, estaban bastante serenas y todavía en shock cuando llegó la primera patrulla de la Policía Local. Poco a poco, fueron tomando conciencia de la situación tan peligrosa que habían vivido.