Las obras de reforma de la plaza Mayor de Calp, que el ayuntamiento adjudicó por 1,1 millones a la empresa Serrano Aznar Obras Públicas, se han quedado en poner vallas. La empresa debió iniciarlas el pasado 2 de mayo. No lo hizo. Y ante de firmar el acta de replanteo, ya exigió al consistorio la modificación del contrato y la suspensión temporal de los trabajos.

Es lo de siempre. La mercantil sostiene que los materiales se han encarecido y que ya no le salen los números. Pero el ayuntamiento se ha cansado. Y suerte que la plaza no está patas arriba. Ya ha enviado a la empresa la rescisión del contrato. Alega demora injustificada en la comprobación del replanteo e incumplimiento del plazo por causa imputable únicamente a la mercantil, que ahora tiene diez días para alegar.

El ayuntamiento se queda la fianza que depositó la empresa, que debía iniciar ayer mismo la retirada de las vallas.

Sí, suerte que la plaza no está patas arriba. El ayuntamiento la reabrirá para que la puedan disfrutar los vecinos mientras tramita un nuevo concurso. El proyecto prevé cubrir la plaza con toldos retráctiles.