Dénia y Xàbia son dos pequeños paraísos. Sin embargo, a sus costas se arrima un gigante. Ya ha comenzado la época de avistamientos en este litoral de las ballenas rorcuales, que son el segundo animal más grande del planeta tras la ballena azul.

Es importante hacer pedagogía en los puertos deportivos, ya que de allí zarpan los navegantes que tendrán la suerte de contemplar a estos grandes cetáceos.

Un momento de la presentación del proyecto Cabo Rorcual Levante-EMV

La Marina El Portet de Dénia ha acogido esta semana la presentación del proyecto Cabo Rorcual, que lleva a cabo la Universitat Politècnica de València con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecólogica. Su director, Eduardo Belda, recordó que es ahora, entre los meses de mayo y julio, cuando estos gigantes se arriman a los cabos de Sant Antoni y de la Nau. El pasado año los investigadores avistaron nada menos que 90 rorcuales. Ahora volverán a estar ojo avizor. Quieren desvelar el misterio de por qué las ballenas se acercan tanto a la costa en su migración anual entre el mar de Liguria y el estrecho de Gibraltar. Estos animales suelen moverse en alta mar, donde hay profundidades de más de 200 metros.

Belda indicó que ahora proseguirán con el seguimiento visual desde la Torre del Gerro (una estupenda atalaya situada en les Rotes de Dénia) y diferentes embarcaciones. Además, este año inician el proyecto de marcaje con un GPS de alguno de estos grandes cetáceos. Lo fijarán en su aleta. Los investigadores pretenden seguir los «pasos» de los rorcuales.