Los bañistas que ya se habían acostumbrado a dejar el coche en las cunetas de la carretera del Portitxol de Xàbia se van a llevar este fin de semana un chasco. Operarios de la Diputación de Alicante colocaron ayer barreras New Jersey de plástico. La medida trata de impedir el aparcamiento ilegal en este vial. Aquí dejaban sus coches los bañistas que acudían a la cala del Francés, la Sardinera, incluso a la cala Blanca y a la cala de la Barraca. Aparcaban los vehículos a ambos lados de la carretera. Los bañistas caminaban por la calzada cargados con neveras y sombrillas. Corrían peligro. Podían sufrir un atropello. Además, tanto coche complicaba que pasaran los vehículos de emergencias.

El ayuntamiento le insistía desde octubre a la diputación, que es la titular de la carretera. Le pedía que pusiera elementos para disuadir el aparcamiento. El organismo provincial era reacio. Le pasaba la pelota al consistorio. Sostenía que era su responsabilidad quitar los coches mal aparcados. La pasada semana la Subdelegación de Alicante se reunió con las dos partes e instó a la diputación a que tomara medidas para impedir que se aparcara en las cunetas.

Los últimos fines de semana los coches ya han invadido los extremos de esta carretera. Ahora las barreras New Jersey impiden aparcar en las cunetas. Los incógnita es saber cómo se las ingeniarán los numerosísimos bañistas de las calas.

El litoral se sacude los vehículos. La Granadella y el Portitxol de buena mañana ya han bajado la barrera y quedan cerradas al tráfico. A primera hora, los aparcamientos están completos.