El golpe ha sido durísimo. Quienes protegen a la población y salvan vidas, quienes se dejaron la piel en la pandemia y durante durante desastres como las riadas o los incendios, quienes están en la calle para ayudar siempre a los vecinos también son vulnerables. La muerte de Juan Manuel Policarpo Moll, un oficial con 23 años de servicio en Calp, cuando intentaba salvar a un vecino atrapado la madrugada del sábado al dominog por la brutal crecida del barranco del Quisi demuestra que los héroes también son frágiles.

Calp llora a Juan Manuel. La capilla ardiente se instalará en el Ayuntamiento de Calp. Se abrirá a las 18 horas para que todos los vecinos puedan pasar a honrar al agente y dar el pésame a los familiares. A las 20 horas, se guardarán 5 minutos de silencio en la plaza Miguel Roselló, que es la de la entrada al consistorio.

Mientras, el funeral tendrá lugar mañana, a las 11 horas, en la iglesia de la Mare de Déu de les Neus.