Calp sigue consternada por la muerte en la madrugada del sábado al domingo del policía local Juan Manuel Policarpo Moll, de 49 años y que perdió la vida al arrastrarlo la brutal crecida de un barranco cuando acudió a salvar a un vecino que estaba atrapado. Esta mañana se ha oficiado el funeral en la iglesia de la Mare de Déu de les Neus. Han asistido muchísimos vecinos. Querían dar su último adiós a un agente que se desvivía por ellos y que llevaba 23 años de servicio. Además, Juan Manuel era un vecino muy querido. Deja dos hijos, Carlos y Manuel, sus "príncipes", como se podía leer en la corona de flores que iba en el féretro.
Al funeral han acudido intendentes jefes y agentes de todas las Policías Locales de la Marina Alta y Baixa, así como representantes de la Guardia Civil, entre ellos el comandante de Calp, Jerónimo Pacheco Polo; de la Policía Nacional, como el comisario de Dénia, Carlos Nieto Millán; del Consorcio de Bomberos de Alicante, de la Cruz Roja o de Protección Civil. Los agentes le han hecho un pasillo de homenaje al féretro que portaban a hombros los compañeros de Juan Manuel Policarpo. El pasillo se situaba en las calles del centro histórico y en la entrada a la iglesia. Al funeral también han acudido la alcaldesa de Calp, Ana Sala, otros munícipes y concejales de la Marina Alta y el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel.
Los vecinos también han acudido en masa a despedir a este policía local. Han querido rendirle homenaje y dejar muy claro el agradecimiento a la labor que todos los días realizan los agentes en la calle, una labor que a menudo no trasciende pero que es esencial. Los policías también son vulnerables. Se enfrentan a emergencias extremas (riadas, temporales, incendios...) y siempre lo hacen con gran profesionalidad y entrega.
También han dado su último adiós a este agente los responsables de prácticamente todas las asociaciones de Calp.
Los vecinos y los policías también han querido acompañar a la familia en unos momentos tan duros. La madre de Juan Manuel, Mari Nieves Moll, ya reivindicó ayer, rota de dolor, que los policías se juegan la vida y que no se les reconoce la gran labor que hacen.
La Policía Local de Calp, la Guardia Civil o Protección Civil han llevado coronas de flores para honrar a este agente de 49 años que era todo un referente en la policía calpina y que siempre demostró su gran vocación de servicio público, su solidaridad y dedicación.
