La Policía Local de Benissa intervino el sábado por la noche con rapidez y evitó lo que pudo haber sido un nuevo crimen machista. Los agentes recibieron el aviso de que un maltratador había quebrantado la orden de alejamiento al acudir a la casa donde vive su expareja. La situación era crítica, ya que los testigos aseguraban que el hombre portaba un arma de fuego y estaba amenazando a la mujer, a la que llegó a agredir. Los agentes acudieron rápidamente. El agresor huyó a la carrera. Los agentes lo persiguieron y lo lograron detener. Al cachearlo, le encontraron en los bolsillos dos cargadores.
Los hechos ocurrieron en una céntrica vivienda de Benissa. Las fuentes consultadas han asegurado que el ahora detenido sabía perfectamente que allí estaba su expareja y acudió con la intención de, como poco, amedrentarla. Llegó a agredirla.
La Guardia Civil se ha hecho cargo del detenido y de la investigación. Se sigue buscando el arma.
