El ministerio del Interior cierra el cuartel de la Guardia Civil de Benissa

Los agentes se marcharán al cuartel de la playa del Portet de Moraira y dejan las dependencias municipales en las que trabajaban desde 2007

Un control efectuado por la Guardia Civil de Benissa en la zona costera del municipio

Un control efectuado por la Guardia Civil de Benissa en la zona costera del municipio / Levante-EMV

A. P. F.

Benissa se queda sin Guardia Civil. Es inminente. El ministerio del Interior trasladará a los agentes al puesto principal de la playa del Portet de Moraira. El ministerio del Interior ya no renovará el contrato de alquiler que mantiene con el Ayuntamiento de Benissa.El arrendamiento termina el próximo 31 de julio. Pero el ministerio no esperará siquiera a entonces. Cierra ya el cuartel de Benissa.

La Benemérita estuvo hasta 2007 en el cuartel de la avenida del País Valencià (la travesía urbana de la N-332). El ministerio pagaba un alquiler de renta antigua al propietario, quien, tras recuperar el edificio, lo vendió a una promotora. La piqueta acabó con el antiguo cuartel, que era del siglo XIXy tenía valores patrimoniales. La promotora empezó a levantar una finca de pisos que nunca acabó. Hay un esqueleto.

Entonces los agentes hicieron la primera mudanza. Se trasladaron a unas oficinas «provisionales» y se instalaron en las viviendas de ese mismo inmueble, antiguas casas de maestros. Ahora las tendrán que abandonar.

 Benissa pierde a una dotación esencial. Este puesto también era imprescindible para la seguridad en la Vall de Pop (el cuartel de Xaló realiza funciones administrativas).

Esta semana el puesto de Benissa ya ha reducido drásticamente su horario. Solo está abierto de 9 a 14 horas. Es cuestión de días el traslado de los agentes a Moraira.

La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) ha denunciado que el cierre de este cuartel «no responde a razones operativas», sino que es consecuencia «de la mala gestión y la falta de entendimiento» entre la dirección general de la Guardia Civil (depende del ministerio del Interior) y el ayuntamiento. Advierte que la seguridad queda mermada en una provincia, la de Alicante, donde «la delincuencia está cada vez más organizada y es más violenta».

Cuando en 2007 se demolió el antiguo cuartel, el compromiso era que el ministerio construyera un nuevo edificio. Mientras, la dotación de Benissa ha estado en «unas instalaciones municipales arrendadas en precario», según denuncia la AEGV, que afirma que el argumento de reagrupar en Moraira a los agentes no se sostiene. Advierte de la notable distancia que separa a los cuarteles que ahora seguirán operativos en la Marina Alta y apunta que en Alicante sí hay puestos de la Guardia Civil muy cercanos como el de Muro y el de Cocentaina (6,9 kilómetros) o el de Castalla y Onil (4 kilómetros) que si estaría justificado unificar.

En cambio, el de Benissa, además de dar servicio a un pueblo de 12.000 habitantes cuya población, sobre todo en su franja costera, se dispara en verano, también es esencial para el interior de la Marina Alta, donde la mayor parte de los municipios no cuentan con policía local.

«Los agentes de Benissa harán en los próximos días sus maletas con destino a Moraira, que se convierte en puesto principal. Damos un paso atrás con reestructuraciones de este tipo», recalca la AEGC.