Un "gaiato" para el olivo milenario de les Valls del Montgó

Tiene una edad más que provecta. Y una salud de hierro. Pero eso no quita para que, de tanto en tanto, se le eche una mano. Es robusto y fuerte, pero el "gaiato" afianza las "extremidades" que le brotan y crecen. La imagen llama la atención de los muchos caminantes que desconectan de todo al pasear por estos caminos y sendas del valle agrícola del Montgó (les Valls del Montgó). Se acercan al olivo milenario, al robusto olivo milenario, y ven ese "cayado" que sostiene una de sus ramas. El conjunto asemeja a un anciano que se apoya en un bastón. La vara, colocada sabiamente, evita que una de las ramas se tronchen. En la Marina Alta, se pueden encontrar soluciones agrarias para sostener el vigor de los olivos y algarrobos y enderezarlos (piedras apiladas para dar firmeza a ramas que pueden romperse).

El olivo milenario está en el camino de Xàbia a Jesús Pobre. Y ese camino se llama "Camí Vell de Pedreguer". Los expertos en botánica aseguran que, en realidad, no es milenario. Tiene, eso sí, más de 800 años, que ya es una edad muy respetable. Es una escultura viva. A unos metros se yergue un momumental algarrobo. Son árboles enraizados en la historia de la Marina Alta. Están rodeados de viñas.

Siete metros de altura

El paisaje agrícola de les Valls del Montgó es una de las maravillas de la Marina Alta. El olivo milenario tiene siete metros de altura y un perímetro de nueve metros y medio. Es un monumento que respira. Su rugoso tronco ha creado formas caprichosas. Está abierto y los niños juegan a meterse dentro y esconderse en este templo natural.

Este valle siempre depara sorpresas. Un ejemplo: los excursionistas se encuentran mojones de piedra tan curiosos como el de la vaca.

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