El pequeño comercio resiste a duras penas el impacto de la crisis económica y las medidas liberalizadoras que tanto gustan a las grandes superficies. En los últimos siete años (fase final de la burbuja y años de recesión económica), las grandes cadenas de distribución han aumentado un 29 % sus ventas, mientras que las pymes y autónomos han visto cómo su negocio se hundía un 26 %, según datos del Instituto Nacional de Estadística recogidos por la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat Valenciana (Covaco). Pese a este importante descenso de los ingresos, los pequeños comercios aglutinan más de la mitad del empleo del sector. «Si bien es cierto que todos los modos de distribución y tipo de productos se ven afectados por la crisis, son las pymes y autónomos quienes han visto más perjudicadas sus cifras de negocio, aunque también son las que mantienen el nivel de ocupación», afirman desde esta organización patronal. Pymes y autónomos representan el 41,4 % del comercio en la Comunitat Valenciana, pero emplean al 52 % de los trabajadores del sector. Las grandes superficies representan el 15 % de las empresas y sólo emplean al 8,8 %, según Covaco. Las .grandes cadenas suponen el 18 % y emplean al 14,4 %, mientras las pequeñas cadenas representan el 18 % y emplean al 21 %. Es decir, a mayor tamaño del empleador menos capacidad de generación de empleo gracias a las economías de escala y control de costes.

La crisis ha tenido un claro impacto en el número de empresas con presencia en el sector. Desde 2007 se han perdido en la Comunitat Valenciana el 14,7 % de los comercios. 2009 fue el año más destructivo en términos de superficie comercial, con un 8,8 % menos de comercios. 2012 fue el siguiente ejercicio con más impacto.

En lo que se refiere al conjunto del comercio al poner menor, una claro indicador de la salud de la demanda interna, el último dato conocido es el de noviembre de 2013, difundido por el Instituto Nacional de Estadística. En la Comunitat Valenciana las ventas disminuyeron entre enero y noviembre un 2 % si se excluyen a las estaciones de servicio. Sólo el sector de la alimentación creció un ligero 1,5 %, mientras que el resto de comercios perdieron un 4,6 % de su facturación. Los porcentajes son algo más superiores en España.

Pese al descenso en las cifras de negocio, la ocupación se mantuvo más o menos estable en la Comunitat Valenciana en los once primeros meses del año. Incluso creció un ligero 0,1 % en el índice general, porcentaje que se eleva al 0,3 % si se excluyen estadísticamente las estaciones de servicio. Los pequeños comerciantes sostienen que son ellos los que mantienen el nivel de empleo porque apuran mucho más los despidos. Por contra se destruyó empleo en esos meses en el conjunto de España. En este caso la ocupación descendió un 1,9 % tanto si es incluye o no las gasolineras.