Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pisos para trabajar

Cuatro operadores extranjeros buscan suelo en València para desarrollar edificios de ‘coliving’, un concepto que combina el alquiler residencial con las zonas de trabajo.

Pisos para trabajar

Cuatro operadores internacionales buscan suelo en València para desarrollar proyectos bajo la fórmula del coliving, una especie de apartahotel con todos los servicios incluidos y zonas de trabajo dirigida a jóvenes profesionales. Este fenómeno social nació hace unos años en Silicon Valley ante la dificultad que tienen los jóvenes emprendedores para encontrar vivienda por los elevados precios de San Francisco y poco a poco se ha ido extendiendo por las principales capitales europeas hasta llegar a València. El coliving combina el concepto de espacio en comunidad y networking (red de contactos de trabajo) con el residencial. Es uno de los segmentos del sector inmobiliario que está cogiendo más impulso en los últimos tiempos a nivel internacional, aunque en España le está costando arrancar por el vacío legal que lo rodea (no es un hotel ni un apartamento tradicional). Los inversores están ávidos de encontrar productos que den más rentabilidad que los bonos, los depósitos o los clásicos del sector residencial (oficinas, locales comerciales o bloques de viviendas) y apuestan por alternativas diferentes como el coliving siempre que se encuentren con unos rendimientos interesantes. El perfil más evidente de los usuarios del coliving es el de los profesionales que trabajan en empresas emergentes con base tecnológica, aunque también es una opción válida para trabajadores con intereses comunes (como por ejemplo investigadores) que quieren compartir espacios de trabajo. La clave es que se busca que todo el edificio esté ocupado por un mismo perfil profesional para generar sinergías. José Ángel Sospedra, director de la consultora inmobiliaria CBRE en Valencia, precisa que las multinacionales Urban Campus, Starcity, Habytat y Dodevivo rastrean el suelo de la capital del Túria para promover edificios bajo este modelo. El directivo apunta que la zona natural para la promoción de edificios de coliving es el PAI del Grao y el entorno de Juan Verdeguer por su proximidad a la Marina (donde se ha consolidado el principal polo de startups de València).

El primer proyecto de coliving en la Comunitat Valenciana se está desarrollando en Alicante. El grupo constructor Marjal invierte seis millones de euros para reconvertir el edificio AXA (situado frente al Mercado Central) en un centro con 50 habitaciones. El inmueble incluirá 350 metros cuadrados de zonas comunes con lavandería, cocinas, salones, comedores, espacio de coworking, así como un área de gimnasio y bar que sumarán otros 150 metros cuadrados. El proyecto (que ha sido incluido en la ordenanza municipal que da prioridad a la tramitación de licencias urbanísticas de proyectos emblemáticos que generen riqueza y empleo en Alicante) está dirigido a un perfil muy concreto: los profesionales que necesitan vivir de forma temporal en la ciudad y los jóvenes que buscan emanciparse. Los usuarios abonarán en una única cuota todos los gastos.

«El coliving funciona como una tarifa plana con un todo incluido que incluye el dormitorio y la zona de trabajo. Son edificios más sofisticados que las residencias de estudiantes ya que suelen tener spa, gimnasio, piscina y zona de coworking. En un solo pago tienes incluido wifi, mobiliario, servicios de limpieza», indican los expertos. «Este sistema combina la gestión como si fuera una residencia de estudiantes, los servicios de un hotel y la estabilidad de un activo residencial con alquileres asequibles y ocupaciones elevadas», añaden desde las consultoras. Los profesionales del sector inciden en que es un producto que tiene recorrido porque en España solo está profesionalizado el 5 % del alquiler de viviendas.

José Ángel Sospedra precisa que los operadores están buscando en València superficies de entre 5.000 y 8.000 metros cuadrados para promover edificios de coliving. «Este tipo de proyectos se van a desarrollar en la zona del puerto y en algún edificio rehabilitado en el centro de València. No veo desarrollos en zonas de expansión como Malilla y Quatre Carreres porque los números no salen. Junto al Grao (zona de Las Naves en la calle Juan Verdeguer) sí que lo veo», precisa el responsable de CBRE en la Comunitat Valenciana.

En cuanto a los precios, actualmente en Madrid las rentas mensuales rondan de media los 1.100 euros, en línea más o menos con un estudio de 30 metros cuadrados, según las estimaciones de la consultora inmobiliaria CBRE. Esto supone que Madrid es una de las zonas europeas más caras para este tipo de producto. José Ángel Sospedra incide en que para que sea un producto competitivo en València el precio del coliving debe acercarse a los 700 euros al mes. El coliving trata de dar respuesta a un gran sector de población activa joven que no se plantea hoy comprar una vivienda ya sea por razones económicas, por libertad de movilidad o simplemente porque prefieren estar en ese tipo de entornos de vida colaborativa. El perfil de los usuarios es el de profesionales de entre 30 y 35 años que tienen las mismas necesidades vitales y la misma nacionalidad, insiste Sospedra.

Un problema para el despegue definitivo del coliving en España es el marco regulatorio. Este sistema de promoción no está sujeto a unas reglas de juego claras, lo que supone un lastre como demuestra que todavía no se hayan desarrollado grandes proyectos como en el resto de Europa. Según los expertos del sector inmobiliario, existe un vacío legal ya que la normativa urbanística no contempla este tipo de producto que fusiona residencial y terciario por su componente hotelero. La normativa más similar que tiene España es la de los apartahoteles. La clave es que la regulación aplicable al uso hotelero difiere a la de las residencias de estudiantes o a las de las viviendas turísticas. Así que este vacío legal provoca que cada caso se estudie de forma individualizada.

Compartir el artículo

stats