El CD Acero y el Atlético Saguntino medirán qué tal les ha sentado el parón huelguista de la semana pasada y cómo asimilan el ambiente prefallero a la hora de disputar sus partidos de la trigésimo segunda jornada de tercera división. Los porteños se enfrentarán mañana a partir de las 17 horas al Cullera, en el cuarto encuentra consecutivo en el Fornás, mientras que los saguntinos viajan a Ribarroja esta tarde a las 17 horas con la vista fijada en los puestos altos.
Estos últimos tienen una oportunidad de oro para dar un golpe en la mesa y presentar su candidatura a pelear por todo en la recta final del campeonato. Y es que sumar hoy la cuarta victoria consecutiva significaría situarse a tiro de piedra de los puestos de promoción de ascenso, algo impensable hace sólo un par de meses. La tarea rojilla no será fácil, ya que las aspiraciones de salvación del Ribarroja pasan por lograrla en su campo, cuyas pequeñas dimensiones favorecen su juego directo.
Por su parte, el CD Acero vio frenada en seco su reacción con la última derrota en casa. La de mañana será por tanto una magnífica oportunidad para congraciarse con la afición y poner tierra de por medio con los puestos de descenso, que en estos momentos se encuentran a cinco puntos de distancia. Su rival, el Cullera, no es superior sobre el papel a los porteños, pero está demostrando una gran conjunción y confianza en sus posibilidades como demuestra su buena clasificación.
