La comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Sagunt volvió a reunirse ayer con carácter extraordinario con el único punto del orden del día centrado en el proyecto de ampliación de la circunvalación exterior de Valencia, conocida como el bypass. Después de coincidir la semana pasada en este mismo foro en la conveniencia de reclamar la anulación del proyecto en su tramo por Sagunt, la oposición añadió la solicitud de una reunión en la sede del Ministerio de Fomento en Madrid para tener la información detallada sobre las últimas modificaciones del proyecto.
Y es que «hay puntos que, en la última resolución, no se aclara como se van a solucionar», en palabras del representante popular en esta comisión, Francisco Villar, y exconcejal de Urbanismo.
Estas dudas surgen después de que la aprobación del expediente de información pública y del estudio informativo de esta infraestructura se recogiera que «se considerarán las modificaciones locales de trazado introducidas en el informe de alegaciones para reducir la ocupación y el impacto en el entorno, alejando el trazado del núcleo urbano de Sagunto y disminuyendo la afección sobre el Pla del Bou».
Otro de los aspectos que preocupa en el Ayuntamiento de Sagunt en torno a este proyecto de circunvalación es que el último acuerdo de Fomento sobre su desarrollo apunta sin dar más detalles que «en el entorno del enlace con la V-21, las actuaciones serán compatibles con la mejora de la conectividad a Parc Sagunt y a la localidad de Puzol, a través de la CV-309, teniendo en cuenta el área de reserva introducida tras la información pública para este objetivo».
235 viviendas afectadas
Mientras tanto, los vecinos del Pla del Bou se mantienen a la expectativa de las gestiones municipales para modificar este proyecto, que pone en riesgo esta urbanización de montaña de Sagunt y otras zonas hasta un total de 235 unidades residenciales, según se recoge en la aprobada declaración de impacto ambiental de las citadas obras.
