La delegación saguntina que acudió ayer al Ministerio de Empleo arrancó nuevas concreciones sobre las ayudas estatales a los extrabajadores de Bosal. Como ya se adelantó a principios de semana tras la polémica reunión que llevó hasta Madrid a responsables autonómicos y municipales del PP junto a miembros del comité de empresa y sindicalistas, el compromiso del director general de Empleo es aplicar a lo largo del próximo año estas medidas, que contemplan subvenciones, convenios especiales con la Seguridad Social y la reposición de las prestaciones contributivas por desempleo.
Entre las cuestiones que se aclararon ayer destaca, según informa la teniente de alcalde, Teresa Garcia, la «ampliación del espectro de ayudas, al rebajar el límite de edad hasta los 55 años e incorporar a los jóvenes». Estas subvenciones se concederán cuando los exempleados de Bosal agoten sus prestaciones. La concejala de Compromís añade que el ministerio pondrá en marcha estas medidas a través de un convenio especial, porque este tipo de ayudas se concede a empresas que continúan con su actividad productiva.
En este caso, sin embargo, Empleo ha tratado el cierre de Bosal «como un caso especial, debido a la forma en la que ha actuado la empresa». Con el objetivo de agilizar la llegada de ayudas, desde el ministerio se reclamó celeridad en la tramitación de la documentación de cada trabajador, un aspecto en el que los sindicatos reiteraron que ya trabajan. Además, también se aclararon algunos aspectos técnicos de la solicitud.
Reunión con «más sentido»
En la reunión de ayer estuvieron el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, así como representantes de todas las fuerzas con representación municipal. Este encuentro tiene «más sentido», según Garcia, que el que tuvo lugar el lunes, ya que «refleja la unanimidad que hay en Sagunt en este tema y se garantiza que en caso de que hubiera algún cambio, esos recursos van a estar disponibles».
