El equipo de gobierno de Estivella está adecentando buena parte de la localidad gracias al plan de inversiones financieramente sostenibles de la Diputación, de Valencia, del que ha recibido 50.000 euros. Con esta aportación, el nuevo gobierno ha convertido en accesible la Casa de Cultura, cuya entrada estaba obstaculizada con un escalón. Pero, además, quiere mejorar el tráfico rodado de la travesía, lo que se conoce como la carretera vieja, para lo que está instalando badenes que limiten la velocidad, así como pintando pasos de peatones para convertir en más segura esta concurrida circunvalación.
El alcalde, Rafa Mateu, también ha avanzado que dedicará un porcentaje importante de los fondos a limpiar calles y fuentes y mejorar el mobiliario urbano para desterrar el «aspecto de abandono que tenía Estivella. Las calles estaban sucias, no se cuidaba la jardinería», afirmaba.
Dentro de este capítulo de actuaciones ha destacado el arreglo del camino de reserva de debajo del puente o la instalación de maceteros en la avenida Camp de Morvedre, así como la reparación de la fuente de la plaza el Hostal, una reivindicación vecinal de meses. «Vamos a optimizar recursos con los mismos medios, todo es cuestión de voluntad y organización», terminaba el alcalde.
