El futuro de la fuente que lleva décadas presidiendo la Plaza de la Iglesia de Petrés es todavía una incógnita después de que, a raíz de la embestida de un toro, se rompiera el pasado fin de semana durante un espectáculo de Bous al Carrer.
Los hechos ocurrían cuando un astado subía al entarimado de alrededor de la fuente, que se había colocado para la ocasión. Esto propició un golpe que dejó la instalación agrietada en su base, según aseguraron a Levante-EMV varios concejales del equipo de gobierno.
Los neumáticos que se habían colocado para proteger la fuente, «no fueron suficientes» para amortiguar el golpe de la res, lo que «la dejó hecha polvo», describía a este diario el alcalde en funciones, Miguel Peruga.
El edil de Compromís aseguraba que desde el consistorio se han puesto en contacto con la peña organizadora de los festejos taurinos con el objetivo de que el seguro de ésta se haga cargo de los desperfectos de la instalación, «un asunto en el que se está trabajando», añadía Peruga.
La edil Teresa Borrás (Compromís) aseguraba que la fuente estaba protegida de forma permanente por una valla de hierro de gran altura que se eliminó en el pasada legislatura y ello «ha restado protección a la fuente». No obstante, insiste en que «las ruedas que puso la peña en ella tampoco la han garantizado en su totalidad, quedando la parte de arriba muy al descubierto», si bien los organizadores sí tuvieron la precaución de reemplazar los grifos por tapones.
El incidente ha dejado la fuente en desuso hasta que desde el ayuntamiento se decida qué hacer. «No sé si tendrá arreglo o habrá que pensar en una nueva», decía Peruga dado su estado.
Los festejos taurinos fueron organizados por la Peña Alternativa, que desde hace unos dos años lleva celebrando por estas fechas una jornada con 24 horas de toros.
