Un centenar de voluntarios ha vuelto a hacer posible este año los «Ludi Saguntini».Junto a la tarea totalmente altruista de las dos asociaciones de profesores que impulsan el festival, Prósopon Sagunt y Ludere et Discere, decenas de personas dedican gran parte de su tiempo y esfuerzo para hacer realidad esta gigantesca oferta educativa que llena de vida el casco antiguo de la ciudad: Son los monitores que atienden los numerosos talleres de cultura clásica que se hacen esos días por toda la ciudad.
Sus edades son de lo más diverso, pues hay desde alumnos de 5º y 6º de primaria de dos colegios de Sagunt que se hacen cargo de los juegos para niños pequeños hasta estudiantes de la Universidad de Valencia que cursan Clásicas o Historia, así como vecinos de Sagunt ya jubilados.
Tampoco faltan chavales que están en secundaria y bachillerato, otros que se forman en Educación Infantil e incluso quienes, ya superadas estas etapas como alumnos o profesores, no faltan a su cita anual con los Ludi Saguntini por mero compromiso personal. «A mí me encanta esta semana, así que no me la pierdo por nada del mundo aunque ya no esté en el instituto», decía una joven con una amplia sonrisa.
Precisamente muchos de esos monitores llevan meses formándose en el horario del recreo o fuera de las clases para conseguir que su taller sea lo más entretenido posible y, si puede ser, aporte alguna novedad. «Hay chavales que se esfuerzan muchísimo. Es de reconocer», decía Xelo Domínguez, profesora del IES La Vall de Segó.
Este año, los monitores más mayores también han hecho un curso previo de formación para mejorar la atención a los participantes, mientras muchos profesores cogían permisos para poder participar en los Ludi y dar lo mejor de sí durante los 5 días que dura el festival. «Venimos a las 8 de la mañana, montamos las carpas y los talleres y luego estamos hasta las 13,30 horas, que es cuando empezamos a recoger. Después desmontamos e intentamos reponer fuerzas», aseguraba Ana Ovando con una amplia sonrisa. «Lo hacemos por convicción, echando a esto muchísimas horas gratis, no sólo los días del festival, y organizándolo con un presupuesto realmente bajo», apuntaba otra docente implicada al 100% en los talleres pero que echaba de menos mayor respaldo económico.
El presidente de Ludere et Discere, Quique Martínez, añadió no obstante que las fuentes de financiación del certamen han mejorado este año y se ha podido llegar a los 12.000 € de presupuesto que el año pasado estaban en 8.000 €. «Ha crecido el número de patrocinadores, al incorporar a Fertiberia y Lafarge junto a Saggas la Autoridad Portuaria y el ayuntamiento. También Oxígeno Sagunto se ha convertido en colaborador, aumentando la cifra de empresas que nos ayudan. Está claro que aún nos faltan por mejorar cosas, pero lo importante es que vamos avanzando».
