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Gilet clausura los aseos de Sant Esperit por falta de mantenimiento

El consistorio vuelve a reclamar a la Generalitat la gestión del recinto, como lleva reivindicando sin éxito desde hace años

Gilet clausura los aseos de Sant Esperit por falta de mantenimiento

El Ayuntamiento de Gilet ha clausurado los aseos del área recreativa de Sant Esperit por entender que «no reunían las condiciones para su uso». Así de claro lo avanzaba el alcalde, Salva Costa (PSPV) en declaraciones a Levante-EMV.

La falta de mantenimiento de los baños y los destrozos y actos vandálicos que éstos han sufrido en los últimos meses ha hecho «necesaria» esta medida, ya que según Costa, «estaban indecentes». A esta situación se añade la carencia de una red de aguas fecales, lo que lleva a que éstas se viertan en un pozo ciego, una situación que ha sido denunciada en más de una ocasión por vecinos y concejales en el pleno de la localidad por considerarlo «insalubre e ilegal».

El alcalde dejaba claro que la competencia en la gestión y el mantenimiento del área recreativa de Sant Esperit es de la conselleria de Medio Ambiente, que a su entender «no está cumpliendo con su cometido». Ante este problema, Costa ha solicitado a la administración autonómica que se haga cargo de las necesidades que tiene la zona o que en su lugar traspase la gestión de la misma al ayuntamiento de Gilet dotándola de la partida presupuestaria pertinente, tal y como pidió su antecesor en el cargo, Juan Carlos Vera (PP) hace tres años, sin que por el momento se haya podido llegar a un acuerdo.

El máximo mandatario de Gilet aseguraba que la zona recreativa alberga visitas diariamente. El martes, lo hacían las amas de casa de la comarca y ayer cuatro autobuses de Valencia llegaban para pasar el día; «tenemos de 150 a 200 personas casi todos los días y eso exige mantener la zona en condiciones y gestionarla como toca, algo que no se está haciendo».

La ausencia de una canalización de aguas fecales también afecta al Monasterio de Sant Esperit, que tampoco dispone de la misma. Tanto una zona como otra vierten las fecales a un pozo ciego. Desde el ayuntamiento se ha requerido a los Frailes Franciscanos que den solución al problema. Sin embargo, desde el monasterio, su actual responsable Fray Fernando Hueso dejaba clara su voluntad de hacerlo, pero matizaba que la actuación debe ser «conjunta y proporcional», es decir que en esta participara la conselleria. «No es cosa de nosotros solos, el área recreativa tiene una capacidad de 3.000 personas y nosotros somos 11 frailes». En caso de no ser posible, la orden ha presentado una alternativa que consiste en la instalación de una depuradora o bien solo para el monasterio o para éste y el área recreativa si la conselleria opina que puede ser una solución. Una instalación cuyo coste sería bastante inferior a la construcción de la canalización, que se ha cifrado en cerca de 200.000 euros. Pese a esta posibilidad, el ayuntamiento sigue defendiendo la construcción de una red de aguas fecales.

Tanto una opción como otra dependen de la respuesta de conselleria, que de momento, «está estudiando la situación», tal y como ha afirmado el alcalde.

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