El PP y el PSPV de Torres Torres se han unido en contra de Compromís, al que acusan de liderar el cambio de las fechas de las fiestas por «interés político». Ambas formaciones consideran que los nacionalistas «están aprovechando la inestabilidad política del ayuntamiento para sacar adelante su propuesta de fiestas sin consensuarla con nadie». El líder de los socialistas, Nacho Maravilla, ha ido más allá al calificar esta forma de proceder como «mezquina y ruin», palabras que secunda el portavoz municipal de los populares y exalcalde, Alfonso Guillem.
Ambos partidos lamentan «la falta de consenso y participación» en la elaboración de las bases para la consulta sobre el cambio de las fiestas, prevista para el 24 de agosto. «Se le ha dado la espalda al pueblo», aseguran. Frente a esta situación, proponen la creación de una mesa de negociación con representantes de los principales colectivos sociales como el Coro, la asociación cultural y los jubilados entre otros, además de la corporación municipal y la secretaria.
Tanto un partido como otro cuestionan varios puntos de las bases de esta consulta, que a su juicio se han redactado de «forma unilateral por Compromís con el consentimiento del alcalde». Entre esos puntos hablan de la edad para votar, que se ha establecido en 16 años. «¿Por qué esa y no otra?, se preguntaba Guillem.
Discrepan también en que sólo sean los empadronados los que puedan ejercer el derecho a voto. «Proponemos que voten todos los que han contribuido o colaborado en las fiestas, estén o no empadronados, y hay listados para comprobarlo», apuntaba Guillem.
Otra de las cuestiones polémicas es la formación de la mesa que velará para que la consulta popular sea fiable. «No se sabe quiénes estarán en esas mesas, quiénes harán el recuento. Deben ser personas que nada tengan que ver con la política, bajo supervisión de personal del ayuntamiento que pueda acreditar que el proceso no está manipulado».
Por último, pese a que la encuesta no será vinculante, desde PSPV y PP opinan que su resultado, en caso de querer aceptarse deberá pasar por pleno, a la que ambos partidos votarán «en contra, por la forma en la que se ha hecho», aclarando que están a favor de una consulta en la que el pueblo opine sobre un asunto tan importante como es el cambio de fecha de las fiestas.
El motivo de esta votación es una petición ciudadana al perder vistosidad los festejos por la fuga de residentes en Torres Torres al celebrarse a partir del 8 de septiembre, cuando comienza el curso escolar. De ahí que se planteen su traslado a agosto o a la primera semana de septiembre.
