La noticia de que el Ayuntamiento de Sagunt va a multar con 200 ? cada vez que se aparque en garajes sin vado ha provocado una oleada de indignación en el ámbito vecinal. Así lo reconocía a Levante-EMV José Girona, presidente de la federación de asociaciones de vecinos, quien daba por hecho que este organismo se opondrá totalmente y emprenderá medidas para que el gobierno rectifique.
El malestar aumentaba tras la campaña informativa que puso ayer en marcha el consistorio y que, entre otras acciones, supone el reparto de fotocopias del bando de alcaldía entre los garajes sin vado. Frente a las críticas, el alcalde , Quico Fernández, ya ha anunciado que «vamos a trabajar en la modificación de la ordenanza para que se ajuste más a la realidad. No es lo mismo una zona en la que no se puede aparcar, que en las que sí que se puede, entre muchos otros aspectos que hay que revisar», declaraba a este rotativo, desde donde quería lanzar un mensaje de tranquilidad a los vecinos.
Sin embargo, Girona insistía en que «la gente está muy caliente y no entiende nada. Este tipo de cosas hará que aumente la cifra de coches que duerme en la calle. Y si aquí, en Almardà, ya hay problemas de aparcamiento muchos fines de semana, la situación se agravará aún más. No tiene sentido», decía.
Por ello, dejaba claro que en los próximos días pedirán explicaciones al alcalde, ante lo que califica de «barbaridad. Una cosa es que pusieran una tarifa más económica o hicieran pagar una cantidad simbólica a personas que aparcan en locales cuya salida está en un paso de cebra o en calles estrechas. Pero lo que han planteado no me parece bien».
El presidente de la federación de vecinos confesaba que, en el caso del casco histórico de Sagunt, la situación aún puede ser peor. «Allí será un problemón. Yo creo que no han medido bien lo que han hecho. Si realmente hacen lo que han anunciado en el bando del alcalde, habrá aún más coches aparcados cuando el tema ése es ya un problema muy grande», decía.
También se mostraba crítico el activista vecinal Primitivo Safont quien a título personal, puesto que ya no está en la directiva de la asociación de vecinos La Victoria, calificaba la medida de «caos» porque dejará más coches en la calle, decía.
Muchos locales que ahora mismo se utilizan como garajes incumplen los requisitos para que en ellos se pueda poner un vado y, por tanto, sus propietarios se verán obligados a reformarlos para acondicionarlos como garajes, cumpliendo todos los requisitos marcados por el departamento de Actividades. «La mayoría de gente, por lo menos en el Puerto, no lo podrá legalizar, porque debería hacer mucha reforma y gastarse mucho dinero. Seguro que para considerarlo oficialmente como garaje le piden extracción de humos, luces de emergencia y demás. Sin embargo, algunos no tienen ni luz. Por eso, muchos no lo podrán cumplir, ni lo podrán asumir», apuntaba.
Sin afán recaudatorio
Aunque el edil de Urbanismo, Pablo Abelleira, negó a Levante-EMV que esa medida tuviera afán recaudatorio, tal y como ha insistido en ello también el alcalde, Safont consideró que las repercusiones para las arcas municipales serían claras si, de repente, muchos vecinos empiezan a dar de alta vados. «Es evidente que así recogerían un montón de dinero. Hacen de todo menos lo que venimos pidiendo hace tiempo, calles donde se pueda circular a un máximo de 30 kilómetros por hora», afirmaba.
Aún así, Safont consideraba que «posiblemente todo quedará en una cortina de humo, como lo de las terrazas. Lo dicen en plan campaña publicitaria, pero luego no se cumple», terminaba.
