Ganar en seguridad, imagen y comodidad en el corazón turístico de Sagunt, además de crear los máximos puestos de trabajo posibles. Éste es el objetivo que se ha fijado el Ayuntamiento de Sagunt con las obras que ha impulsado en el último tramo del acceso al Castillo y en uno de los laterales del Teatro Romano.
La intervención cuenta con un presupuesto de 140.000 € y se ha incluido dentro del Plan de Inversiones Sostenibles, con el que se pretende generar empleo local. Con esta cantidad se han querido resolver numerosos problemas acumulados durante años en un lugar transitado por unos 70.000 visitantes al año y que «exigían más determinación política que inversión en sí», en opinión del concejal de Patrimonio, el portavoz de ADN Morvedre, Pablo Abelleira.
Uno de los aspectos más visbles de la intervención es la mejora de todos los bloques que delimitan la carretera de acceso y que hasta ahora presentaban numerosas grietas. «Estaban fatal; algunos se movían y había sitios con peligro de caída. Por eso se van a arreglar todos y se va a dar una uniformidad a la subida», apuntaba el edil de Patrimonio.
La enorme limpieza realizada en el lateral del Teatro Romano situado, precisamente, junto a esa carretera es algo que ya se puede apreciar, pues la zona llevaba años abandonada y cubierta de vegetación. Ahora, en cambio, incluso se han dejado a la vista en ella dos hipogeos que habían pasado desapercibidos. Por ello, estos enterramientos judíos que durante décadas se confundían con cuevas también se han limpiado y acondioncionado, tal y como se hizo recientemente con los situados en la subida al Castillo, con ayudas de la Diputación de Valencia.
Acceso, bancos y mirador
Dentro del Plan de Empleo, también se ha previsto hacer una obra demandada desde hace años por los guías turísticos: Construir un acceso que permita enlazar la parte superior del Teatro Romano con la carretera que asciende al Castillo y, por tanto, que evite a los visitantes tener que dar un amplio rodeo y subir dos veces a pie la gran pendiente existente. «Es algo que cae de cajón y que no explica que siguiera aún sin hacerse», apuntaba el concejal.
La reparación de puntos de luz y la recuperación de una canalización de aguas que fue tapada «inexplicablemente» hace años para la colocación de unos cables son otras de las medidas impulsadas. También está previsto que se coloquen bancos, tanto en algunos puntos de la subida como en el mirador que se piensa acondicionar junto arriba del Teatro Romano, además de habilitar allí mismo un espacio para aparcar; un lugar que, durante años, ha estado ocupado por una pila de arena y material de obra abandonado. El edil de Patrimonio insistía, no obstante, en que «se ha priorizado el gasto en salarios, para dar el mayor empleo posible»,. si bien consideraba que «con poco dinero, se va dar un nuevo aire a la zona».
El arquitecto que ha diseñado la intervención, el saguntino José Luis Nebot, visitó las obras la semana pasada con representantes de la asociación de vecinos de Ciutat Vella y, como explicaba Abelleira, del encuentro, «surgieron posibilidades de uso para las mejoras que se están haciendo».
