La Fiscalía Provincial de Valencia solicita al juez que declare culpable el concurso de acreedores de Bosal España SAU, cuya planta estaba ubicada en Sagunt, al ver que la empresa agravó su estado de insolvencia mediante actos y operaciones de despatrimonialización y transmisión de sus activos a empresas del grupo o relacionadas.
Así consta en el escrito --al que ha tenido acceso Europa Press-- que el fiscal ha remitido al Juzgado de lo Mercantil número 3 de Valencia, encargado de instruir el concurso de Bosal. Hace unos meses, este órgano judicial reconoció la improcedencia de los despidos en la mercantil, que cerró en 2015, y estableció las indemnizaciones máximas permitidas según el Estatuto de los Trabajadores para estos supuestos.
Seguidamente, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social acordó conceder una ayuda de 1,13 millones de euros para trabajadores afectados por los despidos en la planta de Bosal. Estas subvenciones estarían destinadas a personas mayores de 55 años con unas necesidades sociolaborales en algunos casos, que necesitaban de la ayuda del Gobierno de España.
Bosal España, que forma parte del Grupo Bosal Nederland B.V, integrado por 45 sociedades de carácter internacional, presentó a finales de 2014 solicitud de concurso voluntario.
Según recoge el fiscal en su escrito de calificación, Bosal España transfirió en septiembre de 2013 a la empresa del grupo Bosal Madrid SAU, por un precio de compra cifrado en 4.350.000 euros, la rama de actividad, distribución y comercialización del sistema de escape y repuestos para automoción --After Market o recambios--, incluyendo equipos informáticos, instaladores, vehículos, saldos a cobrar a clientes por importe de 2.407.000 euros, stock de productos asociados y fondo de comercio (175.352 euros), transmitiéndose todo el conjunto como una unidad económica autónoma.
La venta de esta parte de la actividad, según el fiscal, tan solo influyó los activos y no los pasivos, de modo que no se cedieron las deudas subyacentes a la actividad 'After Market', que se habían devengado.
La venta de la rama de actividad --prosigue-- no generó la entrada de recursos en la deudora-vendedora (Bosal España), sino cancelación por simple compensación de deudas del grupo, dado que tres días antes de la venta, AM Bosal Nerderlan, mediante contrato privado, cedió a Bosal Madrid parte de un crédito que tenía contra Bosal España SA por importe de 4.350.000 euros.
Así mismo, Bosal España vendió en julio de 2013 a otra sociedad del grupo, Bosal Ceska República SRO, parte de la maquinaria, utillaje e instalaciones por un importe de 509.900 euros más impuestos.
Mediante contrato privado de igual fecha, también vendió a Industrial Lase International BV maquinaria necesaria para la actividad productiva por precio de 240.000 euros más impuestos, con simultáneo contrato de arrendamiento con opción de compra, de ésta a aquélla, de la maquinaria adquirida.
DOLO O CULPA
Con todos estos datos, el fiscal encargado de este procedimiento estima que el concurso de la mercantil debe ser declarado culpable --puede ser culpable o fortuito--, dado que ha generado y/o agravado el estado de insolvencia mediando dolo o culpa grave mediante actos y operaciones de despatrimonialización y transmisión de activos. "De la deudora han ido saliendo y pasando sus activos a sociedades del grupo o relacionadas, permaneciendo en la misma los pasivo", sostiene el ministerio público.
Así mismo, pide que se declaren personas afectadas por la calificación culpable del concurso a Bosal Internacional Management y a Bosal Nederland; así como cómplices a Bosal Madrid SAU, Orphic Inmuebles España SAU, Bosal Ceska República SRO e Industrial Lase International BV.
Reclama, además, la inhabilitación de Bosal Internacional Management y a Bosal Nederland para administrar los bienes ajenos durante un periodo de 10 años, así como para representar o administrar a cualquier persona durante el mismo periodo; y la pérdida de cualquier derecho que estas personas afectadas puedan tener como acreedores concursales. Como responsabilidad concursal pide la condena solidaria de Bosal Internacional y Bosal Nederland al pago de la totalidad del déficit concursal.
