La presa Algar de Palància ha iniciado al fin su primera prueba de carga de sus 17 años de historia. En los próximos días, la infraestructura se irá llenando hasta albergar medio millón de metros cúbicos, una cifra que nunca había alcanzado desde aquella histórica riada del año 2000 que la llenó por completo recién acabada.
Ayer ya se podía ver perfectamente el agua embalsada. No obstante, se espera que el caudal almacenado supere en los próximos días la altura de la Acequia Mayor en su tramo más cercano a la presa «en unos 40 centímetros», tal y como ya han advertido desde la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) a los regantes de la cuenca baja del Palància.
Las fuertes lluvias recientes han hecho posible esta prueba, gracias a que la Confederación ya reforzó el año pasado el tramo de la Acequia Mayor de Sagunt que atraviesa el vaso del embalse.
Esta obra eliminó cualquier temor a que el llenado de la presa desmoronase el canal de riego, como ocurrió con la riada del año 2000, cuando la CHJ ya tuvo que gastar más de 150.000 euros en la limpieza y reposición de la acequia.
Ahora, con el almacenamiento de medio millón de metros cúbicos de agua, el objetivo de la Confederación es confirmar la permeabilidad de su suelo y determinar cuánto tardará ese caudal en filtrarse y así cumplir con una de las finalidades para las que fue diseñada la presa: Recargar los acuíferos de la Vall d'Uixó, les Valls, el delta del Palància y todas las poblaciones cercanas.
Ese dato aún es una incógnita, pese a que hace más de 12 años se llegaron a invertir 10 millones de euros de los Presupuestos del Estado para colocar unas compuertas en la presa que permitieran almacenar agua; una imagen que aún no se ha visto.
Hasta el año pasado, la Confederación Hidrográfica descartaba hacer esta prueba de carga, fundamentalmente, por el estado de la Acequia Mayor a su paso por la presa.
Una vez reforzado el canal, sólo quedaba esperar la lluvia. Por ello, tras las últimas precipitaciones, los mismos regantes de la Séquia Major insistieron en la necesidad de «aprovechar el momento» y hacerla ya. «Es preciso conocer a fondo las posibilidades del pantano y era preciso hacerlo este año pues igual tardamos otros 10 en que llueva tanto», decía a Levante-EMV su presidente, Ximo Pons.
La previsión del ministerio es hacer en este 2017 otra prueba en Algar para embalsar allí de un millón de metros cúbicos.
Esto en ningún caso va interferir en la llegada de agua del Regajo hasta la cuenca baja del Palància, por lo que los agricultores están tranquilos. Como apuntaba Ximo Pons, «el agua de la Sèquia nos llegará igual, así que para nosotros no hay ningún problema. De hecho, después del año "horribilis" que llevamos, con gran parte de la cosecha dañada por cuestiones climatológicas, el ahorro en agua que estamos teniendo en las últimas semanas es la única buena noticia».
