¿Quién le iba a decir a uno de los socorristas de la posta de la playa de Almardà que realizaría ayer su entrenamiento diario nadando entre delfines?. Y así ocurrió ayer en esta zona de Sagunt. «Ha sido una experiencia extraordinaria que me gustaría repetir. Mañana volveré al mismo sitio a ver si aparecen de nuevo; sería maravilloso», relataba a Levante-EMV este joven socorrista, quien tardará en olvidar los momentos vividos.

Los mamíferos fuero avistados por primera vez desde la torre más cercanas a la posta de Port de Sagunt sobre las 11:00 horas. Nadaban muy cerca de la orilla, « a unos 300 metros, muy próximos a la primera boya», comentaba la coordinadora de playas.

Según los responsables del salvamento en la costa saguntina, se contabilizaron hasta ocho delfines, dos que pasaron primero y otros seis que nadaban en manada «surcando y pescando porque veíamos los peces como saltaban», informaban las mismas fuentes.

La presencia de los delfines generó cierta expectación entre los usuarios de la playa, quienes se acercaron a la orilla para ver el paso de estos mamíferos.

Los animales continuaron su ruta hacia Almardà, donde este socorrista afortunado se encontró con ellos en el agua al igual que un bañista, quien fue alertado por éste para evitar sobresaltos. «Le dije que no se asustara, que a poco metros había delfines y le invité a que viniera conmigo a verlos más de cerca. Nos aproximamos a éstos y a unos 50 metros de ellos el bañista decidió dar media vuelta y salir a la orilla, pero yo seguí en su busca hasta que a unos 5 ó 10 metros me di cuenta que uno de ellos me rodeaba, y es cuando empecé a ponerme un poco nervioso, hasta que conseguí tranquilizarme y disfrutar del momento. Fueron segundos, pero indescriptibles».

Este socorrista no oculta que estos animales «producen respeto pese a que sabes que son delfines. Eran enormes, yo calculo que medirían de tres a cuatro metros de longitud, negros y con una aleta de unos 35 a 40 centímetros. Ha sido todo muy rápido pero intenso, una experiencia que me gustaría volver a repetir».

De hecho, este joven tenía previsto seguir hoy con sus entrenamientos en la misma zona de playa para ver si volvía a suceder y, si no fuera así, para rememorar la vivencia.

Tras pasar por Almardà, los mamíferos siguieron su camino por la costa saguntina en a dirección a Castelló, pasando por la playa de Corinto, donde algunos bañistas también los avistaron.

El equipo de salvamento del Port de Sagunt sacó el dron para poder captar las imágenes, pero no llegó a tiempo.