El gobierno de Sagunt ha presentado esta mañana su borrador del presupuesto municipal para 2018, que cuadrará sus gastos e ingresos ligeramente por debajo de los 79,2 millones de euros, un 8 % más que este año. El alcalde, Quico Fernández, el concejal de Hacienda, Enric Ariño, y portavoces de los cuatro partidos del gobierno, Pepe Gil (Compromís), Guillermo Sampedro (EU), Pablo Abelleira (ADN Morvedre) y Natalia Antonino (PSPV) desgranaron estas cuentas que calificaron de "ambiciosas, pero responsables".

El presidente de la corporación local fue quien detalló el calendario que este presupuesto seguirá después de la "difícil" negociación en el seno del cuatripartito. Esta misma tarde, el documento pasará por el Consejo Económico y Social, antes de someterse a dos audiencias públicas y a varios comisiones informativas con el objetivo de llevarlo a pleno a principios de diciembre.

Ariño fue quien se centró en el endeudamiento, cuyo nivel rondará el 60 % cuando se contrate el préstamo de 7,5 millones, muy lejos del 110 % que se contempla como máximo en la legislación. Así, la deuda viva del Ayuntamiento de Sagunt superará los 37,5 millones, aunque el gobierno justificó que las arcas municipales tienen capacidad para hacerla frente.

Otro de los puntos en el que se centraron los portavoces del cuatripartito son las inversiones, que alcanzarán los 12,5 millones de euros para el año que viene. La Gerencia, los barrios, la Domus Baebia, el Grau Vell o las actuaciones urbanísticas son algunos proyectos para los que el ayuntamiento reserva partida para el próximo ejercicio. El aumento en el gasto social fue otro de los aspectos destacados de estas cuentas, que también contemplan un aumento en el personal que se traducirá en un crecimiento de la plantilla municipal en 17 trabajadores.

Fernández destacó que el incremento presupuestario no se traduce en un aumento de la carga impositiva, ya que "sólo han crecido los impuestos asumibles desde la progresividad fiscal, porque la mayoría se mantienen congelados".