Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Ecología

Sonidos del marjal al descubierto

El marjal de Almardà acogerá una de las primeras jornadas divulgativas de España sobre ecología acústica - Dos ornitólogos presentarán las grabaciones que han hecho en el humedal durante un año

Sonidos del marjal al descubierto

El marjal de Almardà-Almenara permite escuchar habitualmente hasta 86 especies distintas de aves, algunas amenazadas en toda la península. Ante este auténtico tesoro natural, los ornitólogos Pedro Montesinos y Ángel Bereje han querido documentarlo, a lo largo de cuatro estaciones, en un trabajo que darán a conocer el próximo día 17 en una cita muy especial: Una de las primeras jornadas de ecología acústica de España que está pensada para todos los públicos.

En ella se pretende acercar a niños y mayores una disciplina por lo general reservada a ornitólogos, científicos o universitarios, "pero que es apasionante", como apuntaba Ángel Bereje, ornitólogo de la entidad que ha promovido la actividad, Acció Ecologista de Agró. "Pájaros en el marjal se oyen siempre y nuestra idea es expandir el trabajo que ya realizamos desde hace años con la custodia de tierras de propiedad privada, donde favorecemos la biodiversidad, a ese territorio sonoro que está a menudo olvidado", apuntaba.

Las grabaciones realizadas junto a Montesinos, siempre entre las 8 y las 10 horas, no sólo desvelan la diversidad de aves en este humedal. También han revelado hasta qué punto los motores constituyen la principal contaminación sonora en la zona. "A parte de oír las aves o elementos ambientales como el viento o el agua, lo que más está presente es el sonido de un motor. Especialmente, es por las avionetas y ultraligeros que vuelan muy bajo, en todas las épocas del año, y son lo que más molesta. Pero también hay de turbinas, de coches o motosierras. Y un rumor de fondo, constante, del paso de vehículos por la autovía AP7", comentaba Bereje.

Nuevos proyectos

La puesta en marcha del proyecto fue idea de Pedro Montesinos, un vecino del Port de Sagunt afincado en Barcelona, que conocía la afición de Bereje por las aves y logró así un tándem perfecto. "Nuestro trabajo se puede mejorar grabando a diversas horas del día, porque no se oye lo mismo, pero lo que hemos querido hacer es difundirlo más allá de la gente entendida, aprovechando que la Finca de Penya se ha convertido en un centro de educación ambiental", explicaba.

Su apuesta, sin embargo, no se queda ahí. Además de difundir sus grabaciones en una página web que incluya explicaciones de cada canto, su objetivo es hacer lo mismo en otros espacios de la comarca e intentar conseguir que la Finca de Penya "se convierta en un referente de la ecología acústica a nivel nacional".

Compartir el artículo

stats