La Policía Local de Sagunt controló durante cuatro días una veintena de vehículos destinados al transporte escolar y el balance final fue positivo por el alto grado de seguridad que presentaron los autocares, según destacan fuentes municipales. Esta inspección forma parte del convenio de colaboración entre el ayuntamiento y la Dirección General de Tráfico (DGT) y en aplicación del real decreto sobre condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores.

Los 10 agentes destinados a la unidad de tráfico inspeccionaron de forma exhaustiva los vehículos y, según recuerda el concejal de Policía Local de Sagunt, Enric Ariño, este control forma parte de las campañas que periódicamente hace el cuerpo municipal para controlar diversos aspectos como el alcohol, las drogas, o el estado de vehículos. En esta última acción «se controló el buen funcionamiento de los transportes escolares tanto de escuelas concertadas como públicas».

Esta inspección prestó especial atención a la antigüedad de los vehículos, extintores, martillos para la ruptura de ventanas de emergencia, botiquín de primeros auxilios, cinturones de seguridad que son obligatorios en todos los fabricados a partir de 2006, así como suelo antideslizante, apertura manual de las puertas desde el exterior para casos de emergencia o placas identificativas de transporte escolar delante y detrás.

Educación vial

Según estadísticas oficiales, el 90 % de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en la subida y bajada al vehículo o en los instantes inmediatos. Por ello, y para prevenir futuros incidentes, la Policía Local ha hecho hincapié en la importancia de una buena educación vial y recuerda que los trayectos de casa al colegio pueden ser buenos momentos para que el adulto que acompaña al menor le recuerde algunos mensajes sobre seguridad vial.