La Sociedad de Fomento de Agricultura de Faura, conocido entre sus vecinos como la Protectora, ha pasado a ser propiedad municipal. Este nuevo edificio municipal se perfila como el germen de un futuro centro cultural que dinamizará una localidad comprometida con la literatura, desde Viu la Biblio; la música, con el Cicle de Música Valenciana i de Cambra; el teatro, con FaurArt o el impulso a entidades como la Sociedad Joventut Musical de Faura, entre otras muchas iniciativas.
El edificio de la Protectora está actualmente protegido por el PGOU, de ahí que se prevea el mantenimiento y preservación de su fachada modernista. En cuanto al interior, por el momento se prevé convertir la planta baja en una sala de multiusos con capacidad para 300 personas; mientras que el destino de la primera planta están todavía por determinar.
El equipo de gobierno aspira a convertir este edificio en el centro cultural municipal de Faura si se lograse anexionar el inmueble anexo propiedad de la UGT local. «Con este son dos los edificios de propiedad municipal ubicados en la calle Mayor, se trata de la Casa Gran y la Protectora; ahora bien si finalmente se cierra la adquisición del emblemático edificio de la Corbella podría construirse un auditorio», apuntan.
Por el momento el ayuntamiento ha agradecido a los socios de la Protectora su predisposición ante la actuación. Tras meses de negociación, el ayuntamiento cerraba la firma de cesión del local. Un acuerdo que recoge el compromiso municipal de organizar unas jornadas anuales dedicadas a la agricultura, así como la reserva de un espacio específico para la Sociedad de Fomento de la Agricultura en el nuevo edificio consistorial.
«En caso de poder materializar la adquisición del tercer edificio en la arteria principal de Faura, estaríamos ante una ampliación patrimonial clave y ante todo de tres edificios históricos de gran carga emocional para los faureros» añadían desde el equipo de gobierno.
