El rechazo del Ayuntamiento de Sagunt a atender el requerimiento de Lafarge sobre un error material en el Plan Generación de Ordenación Urbana (PGOU) referente a los límites de la cantera del Sall del Llop ha provocado la primera reacción desde la Asociación de Empresarios de El Camp de Morvedre (Asecam).

Ha sido a través de su presidenta, Cristina Plumed, quien señala que "no entiendo lo que ocurrió en el pleno", porque, frente al requerimiento de la cementera de un pronunciamiento técnico, el consistorio "lleva el asunto al pleno para reafirmar lo que ya se dijo desde el principio. No van a negociar nada pues dicen que la empresa incumple y deberá pagar por lo que "ha hecho mal"".

Plumed apunta que "durante el tiempo que se han admitido las declaraciones extractiva, el ayuntamiento no ha dicho que no se estuvieran haciendo bien y que no se extrajera del sitio correcto. También se ha cobrado el canon correspondiente, pero cuando hay una diferencia de criterio, para el consistorio lo fácil es pensar que la empresa actúa de mala fe y que, por lo tanto, tiene que pagar una indemnización», apunta la presidenta de Asecam.

La representante empresarial asegurado que "si la intención fuera que la empresa estuviera ejerciendo su actividad por más tiempo, se cobraría lo justo para esa extracción. Pero como lo que quieren es que la empresa se vaya, esto es un buen motivo para sacarlo a la palestra".

Plumed lamenta que, con actuaciones como esta, desde el ayuntamiento se están dando mensajes negativos para la llegada de nuevas empresas y de nuevas actividades, "que luego deben ser compensados por parte de la Generalitat, Asecam y la Confederación Empresarial Valenciana, porque el ayuntamiento suma y sigue en esta posición". Así, desde Asecam critican que "el diálogo no existe, porque unilateralmente a una de las partes no le interesa. Al final, la solución que podría ser más sencilla, se vuelve muy complicada de conseguir por la vía pacífica y lógica".