El sector siderúrgico se confirma como el principal motor del puerto comercial de Sagunt. Así lo ponen de relieve los datos del primer semestre del año que acaba de hacer públicos la Autoridad Portuaria de Valencia y que reflejan que más de la mitad de los tráficos registrados en los seis primeros meses del año fueron generados por este sector.
En concreto, el puerto comercial ha movido hasta finales de julio 2,96 millones de toneladas, de las cuales 1,57 millones, el 53%, fueron productos siderúrgicos. Si excluimos la mercancía transportada en contenedores, el peso de los siderúrgicos se dispara al 72,9 %. Además, los datos de este mes reflejan el repunte que están experimentado estos tráficos, con un incremento del 18,8 % respecto a los resultados del pasado año por estas mismas fechas.
Le sigue en importancia el sector del automóvil, que además de generar el 12,5 % de los tráficos portuarios volvió a demostrar que es el más dinámico de los que actualmente operan en las instalaciones saguntinas. En este sentido, los últimos datos señalan que los vehículos y las piezas de repuesto para automóviles supusieron en el primer semestre del año un movimiento de 372.000 toneladas, lo que supone un crecimiento interanual del 44,4%.
Más llamativa resulta esta tendencia cuando se observa el total de vehículos manipulados en el puerto de Sagunt durante la primera mitad del año. En total se movieron en operaciones de carga y descarga 220.922 automóviles, una cifra que representa un incremento del 50,58 % respecto a los datos de julio de 2017.
Mucho más modesto es el peso de la mercancía transportada en contenedores que ha pasado por Sagunt durante estos seis meses. Sus 288.641 toneladas representan le 9,7 % del movimiento total registrado en el puerto. Y su crecimiento también fue mucho menor: un 2,38 % más que en el mismo periodo del año anterior.
El contrapunto a estos datos lo aporta el comportamiento que está registrando los tráficos de graneles. En total, este tipo de mercancías supuso el 13,2 % de los movimientos portuarios, con 392.375 toneladas. Sin embargo, en este caso, lejos de aumentar, los tráficos de graneles experimentan un importante retroceso del 16,83 % respecto al pasado año por estas mismas fechas.
En este apartado se encuentra un sector como el de abonos naturales y artificiales con fuerte tradición en el puerto. Este tipo de mercancías ha generado un movimiento hasta finales de junio de 219.000 toneladas, lo que representa una caída del 17,46%.
Pero donde mayor impacto tiene este retroceso es en los graneles líquidos que con 243.000 toneladas sufren un desplome del 79,1% respecto al año anterior. El responsable de este comportamiento es el gas natural que con 123.000 toneladas retrocede casi un 88 % con relación a los datos del pasado año.
Esta tendencia de los graneles le pasa factura a los resultados totales del puerto que pierde un 13,7% de su actividad respecto a julio de 2017. Sin no se contabiliza el gas natural, el crecimiento del puerto hubiera sido del 15,7%.
