Socialistas y populares acordaban ayer presentar una moción de censura contra el alcalde de Torres Torres, Rafa Gil. Ambos grupos se reunieron a primera hora para sellar un acuerdo que le arrebate la vara de mando y devuelva la calma al municipio de La Baronia. Esta tranquilidad se ha visto sacudida durante los últimos días con el procesamiento del mandatario, quien ha aceptado 8 años de prisión por pertenencia a banda organizada, tráfico de drogas y malversación de caudales públicos, entre otros delitos, tras llegar a un acuerdo con el fiscal, que solicitaba para él 30 años de cárcel.

La negativa a dimitir de Gil, quien considera que su causa es a título personal y nada tiene que ver con la gestión al frente de la alcaldía, que valora de positiva, ha forzado la puesta en marcha de esta moción de censura, que «sí vamos a tirar hacia adelante», afirmaban desde ambos grupos, aunque todavía queden algunos flecos que resolver.

Entre los más importantes está decidir quién será el candidato que se exige por ley en la presentación de una moción de este tipo. Pese a que no hay confirmación oficial, todo apunta al actual concejal y número dos en las listas del PP, Víctor Mateu.

Las posibles irregularidades en el cobro de dietas por parte del exalcalde, Alfonso Guillem, también del PP, que investiga actualmente la Fiscalía tras la denuncia de Compromís, enfrían sus posibilidades de ser el candidato, circunstancia que se suma a la renuncia de Luis Bolinches, el número tres, así como del edil socialista, Vicente Cabo, que ya anunció en declaraciones a Levante-EMV que «no tengo ninguna aspiración a la alcaldía». Por su parte, Mateu guarda silencio y prefiere no pronunciarse, a la espera de una reunión en la que se confía en dejar este asunto zanjado.

Otro de los aspectos que tampoco se ha aclarado es la conformación del nuevo gobierno. Entre las incógnitas está si los socialistas se integrarán junto a los tres ediles del PP, un asunto que la dirección comarcal del PSPV abordaba en la reunión mantenida en la noche de ayer. El concejal socialista reconocía su voluntad de formar parte del equipo de gobierno, aunque dejaba claro que antes «debo hablarlo con mi partido».

Reparto de carteras

Por otro lado, fuentes populares aseguraban a este medio que la intención es que Cabo esté en el equipo y con una cartera de importancia, incluso se ha dejado sobre la mesa la posibilidad de nombrarlo teniente alcalde.

Ambos partidos también quieren hablar de programas y dejar claras las prioridades políticas y de gestión, si la moción sale adelante. De momento, voluntad de presentarla hay y también los cuatro votos necesarios para hacerlo: tres del PP y uno del PSOE, la mayoría absoluta que se requiere por ley, en este caso en una corporación formada por siete concejales.

Sin embargo, a esta mayoría todavía pueden sumarse dos ediles de Compromís. La coalición nacionalista, en un comunicado, deja la puerta abierta a secundar esta moción de censura. «Compromís no se cierra a hablar con ningún grupo político», recoge el documento, pero lo cierto es que al cierre de este edición, este medio no tenía constancia de que se hubiera producido algún contacto por parte de los nacionalistas ni del resto de grupos con ellos. «Creemos que la iniciativa la debe de tomar el PP, que tiene el mayor número de concejales», señala el escrito.

Sin embargo, tal y como ha podido conocer Levante-EMV, los nacionalistas estarían dispuestos a apoyar la moción de censura, pero con condiciones, entre ellas que no sea Guillem el candidato tras su investigación por Fiscalía. «No sería un candidato de consenso», alegan.

Piden a Rafa Gil que dimita para «no dañar más»

La coalición de Compromís en Torres Torres pedirá la dimisión del alcalde, Rafa Gil en el próximo pleno, que prevé cele brarse este mes. Los nacionalistas consideran que su marcha debe ser inmediata para «no dañar más la imagen pública de Torres Torres», después de la gravedad de los hechos de los que se le acusan, añadía en el escrito. Una petición que ya pusieron sobre la mesa tras su detención y en la que vuelven a insistir, pese a la negativa del alcalde a marcharse como ha asegurado a este medio.