El Ayuntamiento de Sagunt celebró ayer el último debate sobre el estado del municipio durante el presente mandato y resultó el más parco en anuncios por parte del gobierno y el más previsible en la visión que los diferentes partidos ofrecieron sobre el momento que vive la capital de El Camp de Morvedre.

Desde el cuatripartito, que tuvo voz a través de los portavoces de sus cuatro formaciones y del alcalde, Quico Fernández, se puso el acento sobre el indudable avance en varias materias, al tiempo que se reconocieron algunos fallos, principalmente provocados por la lentitud a la hora de hacer realidad muchos proyectos. Mientras, desde la oposición se pintó un panorama desolador, como «el Beirut de los años 80. Parece que tengamos que estar esquivando las bombas», según parodió el concejal de EU, Guillermo Sampedro.

Durante las algo más de cuatro horas que duró el debate, Fernández fue el que más tiempo dispuso y empezó por destacar el «hito» que suponen los tres años largos de estabilidad política, que ha permitido trabajar en «la igualdad, la justicia y la cohesión social». El nacionalista resaltó que «somos un referente económico, cultural y social» y señaló especialmente «la losa que nos quitamos de encima con la sentencia del Malecón de Menera», que alejó los fantasmas de pagar 100 millones de euros por su expropiación.

La mejora del mercado laboral, en la que incidieron varios voces desde el gobierno, la llegada de fondos europeos para diversos proyectos, el impulso de Parc Sagunt y VidaNova Parc, el desarrollo de la ciudad como «destino turístico con mayúsculas», la recuperación patrimonial en favor de la candidatura al reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad, la movilidad, las inversiones educativas proyectadas o la reformulación del convenio con la Autoridad Portuaria de Valencia para abrir el puerto a la ciudad, «proyecto que me hace especial ilusión», fueron algunos de los aspectos destacados por el alcalde.

Referente en muchos ámbitos

«Desde la humildad, creo que estamos haciendo muy bien trabajo para que Sagunt sea referente en muchos ámbitos y así hayamos contribuido a mejorar la vida de las personas. La ciudad está irreconocible después de estos tres años, aunque, las herramientas que tenemos -en referencia a la farragosidad administrativa- hacen que a veces hasta nosotros nos desesperemos por la lentitud en algunos temas».

También desde el gobierno, Pepe Gil, Guillermo Sampedro, Pablo Abelleira y Natalia Antonino se encargaron de replicar a los portavoces de PP, IP y Cs y hacer un sucinto repaso de los avances en las delegaciones que dirigen cada uno de sus partidos, mientras que desde la oposición se ofreció otra visión muy distinta.

Sergio Muniesa fue el más «catastrofista», según le afearon desde el gobierno. El portavoz popular lamentó los «tres años de manipulación» del cuatripartito, que le ha puesto en contra a toda la ciudad, señaló. «Este es el gobierno del sectarismo y la incapacidad, que solo se ha dedicado a aprovechar que se encontró con un ayuntamiento saneado y lleno de proyectos que culminar». La «incoherencia», la «decepcionante política industrial», el «clientelismo», el «acoso» a algunos sectores, la falta de respeto o «el record en la pérdida de credibilidad» fueron algunos de los pecados que Muniesa acachó al gobierno municipal de Sagunt.

Desde Iniciativa Porteña, Manuel González empezó por pedir que «dejen de llamar a los programas Emcuju y Empuju -sendas acciones formativas- y mejor denles el nombre de Enchufu», un comentario que recibió críticas al aclarar que ni siquiera se habían cubierto todas las plazas ofertadas y que si tenía pruebas, que lo denunciara. «Igual piensa así porque es lo que hacía usted cuando estaba en el gobierno», le dijeron.

«No se ha hecho nada»

Más allá de este rifirrafe, el portavoz segregacionista aseguró que «en tres años no han hecho nada, al menos en el Puerto». Y ahí centró la mayoría de su discurso, que reconoció que había basado en el de los dos últimos años, «con cuatro retoques». El puente de conexión con Canet sobre la desembocadura del Palància, el tren de pasajeros hasta el Port, la Gerencia, el instituto número 5, el pabellón frente al cementerio, el canal frente a CiudadMar o el museo industrial fueron algunas de las cuestiones que González destacó por la falta de avances.

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Raúl Castillo, reconoció con matices la mejoras turística y de accesibilidad con el plan de movilidad, aunque puntualizó que «la ciudad no es ahora mejor que hace tres años en la optimización de los recursos humanos», la limpieza viaria, aspecto el que pidió la aplicación de la ordenanza, la seguridad ciudadana o «la ejemplaridad en la fiscalidad».

En definitiva, cada portavoz pintó los aspectos de la ciudad que más le convenía en función de la posición que ocupa en el ayuntamiento en un debate que apenas reunió a media docena de vecinos en el salón de plenos.

Las frases

«Los portavoces de la oposición parece que viven en otro pueblo, porque todo lo ven mal. Algunas críticas son esquizofrénicas»

PEPE GIL

PORTAVOZ DE COMPROMÍS

«Es un gobierno de becarios con sueldos de ingenieros. Pasará a la historia como el más sectario y nefasto para la ciudad»

SERGIO MUNIESA

PORTAVOZ DEL PP

«En estos más de tres años se han hecho las cosas razonablemente bien. Podemos sacar pecho por la proyección

de la ciudad»

GUILLERMO SAMPEDRO

PORTAVOZ DE EU

«El avance en cuestiones serias de este gobierno con 17 liberados que cuestan un millón de euros ha sido cero patatero»

MANUEL GONZÁLEZ

PORTAVOZ DE IP

«Agradezco el tono constructivo del Ciudadanos, pero PP e IP no han aportado nada, más allá de verlo todo mal»

PABLO ABELLEIRA

PORTAVOZ ADN MORVEDRE

«La ciudad ha dejado de ser

un destino de excursiones para convertirse en un

sitio para pernoctar»

NATALIA ANTONINO

PORTAVOZ ADJUNTA DEL PSPV

«La ciudad no es ahora más eficiente, limpia, segura, atractiva fiscalmente ni accesible»

RAÚL CASTILLO

PORTAVOZ DE CS

El Horno Alto del Port se reabre al fin a las visitas

Uno de los temas recurrentes en el pleno del estado del municipio de Sagunt de ayer fue la inminente reapertura a las visitas del Horno Alto del Port, que hoy se presentará de forma oficial, así como el rescate de la «abandonada» Fundación de Patrimonio Industrial. Este anuncio viene acompañado esta tarde por la presentación del libro de Julio Bodí El procés de patrimonialització de les antigues instal·lacions siderometal·lúrgiques de Port de Sagunt (1984-2014) que tendrá lugar a las 18 horas.