El caudal del Palància a su paso por Sagunt se ha visto reducido en las últimas horas, en relación con el que presentaba anoche, pero los ayuntamientos de la cuenca baja del río siguen en alerta y no se descarta una nueva crecida, por lo que se mantienen las recomendaciones de no cruzar el cauce y de extremar las precauciones cerca de él.

El parón de las lluvias ha llevado a que, esta mañana, se desaguaran 15 metros cúbicos por segundo del pantano del Regajo, si bien anoche la Confederación Hidrográfica del Júcar alertó a las 22 horas de que, en las próximas horas, iba a desembalsar de allí 50 metros cúbicos por segundo, como informó Levante-EMV.

Esa cantidad se unía al agua que ya se estaba desaguando desde la presa de Algar de Palància y que en la noche del jueves era de 60 metros cúbicos por segundo, aunque con la previsión de llegar horas después a los 100.

A esas cifras se suman la de los afluentes situados debajo de la presa de Algar, de ahí que el río ofrezca estos días una imagen sólo habitual en su cuenca baja en casos de gota fría o fuertes lluvias.

Hasta ayer a última hora de la tarde del viernes, el pantano del Regajo permanecía cerrado con tal de acumular agua para el riego, pues había iniciado la semana a la mitad de su capacidad. La intensidad de las lluvias hizo que, en poco más de 24 horas, ya estuviera al 75% y, finalmente, anoche la Confederación decidió empezar a abrirlo.

Aunque el cauce del río ya anegaba el viernes el delta del Palància, los aportes de la presa de Algar eran menores, pues ese día de madrugada se soltaron como máximo 50 metros cúbicos, para luego quedarse en 15 esa mañana e ir aumentando hasta esa noche hasta los 60, según datos de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), a los que ha tenido acceso este diario.