Las lluvias torrenciales, que sólo en Sagunt han dejado 134 l/m2 entre el jueves y ayer, provocaron inundaciones en calles y caminos que dificultaron el tráfico hasta el punto de que varios conductores tuvieron que ser rescatados. Aún así, la suspensión de las clases en colegios e institutos redujo considerablemente la circulación y, además, la falta de precipitaciones vespertinas propició que todo volviera poco a poco a la normalidad, aunque el río bajara con un caudal inusual hasta anegar el delta.

Los mayores problemas se registraron entre la tarde del jueves y la madrugada de ayer. En ese intervalo, la Policía Local junto a bomberos y Policía Nacional, tuvo numerosas intervenciones, las más angustiosas las de dos conductores atrapados, en las calles Honorio Maura y Conxa Pallarés y en el camino de Assagador entre Quartell y la playa de Sagunt, donde un coche cayó a la acequia.

Otras inundaciones problemáticas fueron en el cruce de las avenidas Mediterráneo y Camp de Morvedre del Port, donde también hubo fuga de aguas fecales. Además, el agua anegó viviendas y locales en muchos puntos de la comarca. Hasta en bares y garajes se tuvo que intervenir, al igual que en los colegios Villar Palasí y Begoña, donde entró el agua «aunque sin ocasionar daños de consideración», según el edil de Educación, José Manuel Tarazona. El Museo Histórico de Sagunt también sufrió filtraciones y vecinos de diversas urbanizaciones de Almardà tuvieron problemas para salir de casa a pie.

En un balance inicial, el alcalde de Sagunt, Quico Fernández, consideró que «no había habido incidencias graves ni actuaciones relevantes» e indicó que «más o menos, se está dentro de la normalidad». A ello añadió que desde el ayuntamiento «se ha tomado nota y se están elaborando memorias para resolver algunos casos que puntualmente son más graves», al tiempo que agradeció «el trabajo y profesionalidad» de los departamentos municipales.

Pantano del Regajo

Desde el jueves y hasta el cierre de esta edición, el pantano del Regajo permanecía cerrado, tras iniciar la semana a la mitad de su capacidad y, en poco más de 24 horas, llegar al 75 %. La CHJ, no obstante, sí abrió el jueves la presa de Algar de Palància. En la madrugada del viernes, el caudal llegó a los 50 m3, cantidad que descendió a los 15, pero que, en cuestión de horas, aumentó hasta los 60. La previsión, es que el caudal aumentara y llegara a los 100 m3, a los que habría que sumar la de los afluentes situados debajo de la presa.