El alcalde de Sagunt, Quico Fernández, ha vuelto a reclamar una vez más a la administración estatal y a la autonómica una «respuesta positiva» a los requerimientos realizados desde el Ayuntamiento de Sagunt sobre importantes asuntos que afectan de una manera importante a la gestión municipal y a lo que ha considerado la integridad de una parte del territorio municipal: La desalinizadora, los espigones previstos en la playa de Almenara y su afección a la costa saguntina, así como la necesidad del acceso norte al puerto comercial y a Parc Sagunt.

Se trata de tres temas que, a su juicio, son «serios y afectan a la estabilidad del municipio», por lo que ha pedido que sobre ellos «no se haga electoralismo». «Nosotros estamos trabajando, las elecciones serán cuando toquen, pero en estos momentos lo que hay que hacer es continuar trabajando y con compromisos serios que sean realidades», decía en un comunicado municipal.

En primer lugar, ha destacado que el ayuntamiento aún está esperando una respuesta positiva sobre la petición a la administración estatal para el ministerio correspondiente asuma el coste de la construcción de la desaladora «y por ahora no hay ninguna respuesta positiva, yo evidentemente, creo que es una falta de consideración para nuestra ciudad y una injusticia que se ha de reparar de manera urgente. Por otra parte, ya habido un sobrecoste que no ha sido aceptado por el Ayuntamiento y del cual no conocemos el detalle. Por tanto el ayuntamiento no puede asumir la amortización de esta construcción que además tendría un beneficio para toda la cuenca de la Confederación Hidrográfica del Júcar, del área metropolitana de València y por este motivo, necesitamos una respuesta positiva por parte del ministerio asumiendo el coste de las desaladoras, tal y como se está dando también en otros casos».

A su juicio, otro de los proyectos que «amenazan la integridad de nuestro territorio» es el proyecto constructivo de espigones en la costa de Almenara. «Hasta ahora no tenemos respuesta positiva porque las alegaciones que presentó Sagunto no han sido contestadas y a través de la prensa nos hemos enterado de que se han producido reuniones a las que no hemos sido invitados y en las que se ha hablado de la aportación de arena».

Fernández, asimismo, ha manifestado que no hay respuestas sobre lo que va a pasar con «ese proyecto que tanta preocupación ha generado en la ciudad, en general, y a los vecinos de Almardà» y dice que el problema no se soluciona con simplemente quitar piedras y aportar arena: «Si construyen los espigones en Almenara, continuaremos oponiéndonos, mientras no tengamos soluciones que garanticen la estabilidad de nuestra costa».