Una zanja abierta para telefonía móvil en pleno Parque Natural de la Sierra Calderona, y con el cableado al aire varios días, han derivado en una denuncia al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil. La ha elevado un grupo de vecinos, provocando la paralización de las obras, cuyo promotor es el Ayuntamiento de Gilet, que además no contaba con la aprobación de la Dirección Territorial de Medio Ambiente.

Según fuentes de la conselleria, el consistorio del Camp de Morvedre solicitó en febrero autorización, sin que la dirección territorial se hubiera pronunciado aún. El alcalde de este municipio del Camp de Morvedre, Salva Costa (PSPV), asegura que se les dio luz verde, circunstancia que niegan en el departamento que dirige Elena Cebrián. «No tienen permiso, porque no se ha resuelto aún esa solicitud y en todo caso necesitarían la tutela de la dirección del parc natural en cada palmo de la obra», insistía ayer Toni Marzo, director general de Medio Natural y Evaluación Ambiental.

El escrito presentado ante el Seprona denuncia la instalación de una acometida de cable eléctrico desde el pozo donde se extrae el agua para Gilet hacia una balsa situada monte arriba, donde se halla la urbanización Santo Espíritu fase II y III.

Los vecinos hablan incluso de «delito ecológico» y no ocultan su miedo a una «fatalidad», pues «las probabilidades de un incendio son altísimas y más por donde discurre» el trazado. «Se realiza de forma exterior y unida a una tubería de agua potable, con unos cables dentro de un tubo corrugado por encima del suelo, altamente peligroso si lo manipula una persona o animal», inciden, situación que califican de «grave negligencia».

Todo ello sin contar con que la excavación de tierras «haya podido afectar a la vegetación», tal como advertía Marzo. Un agente medioambiental levantó acta al tener conocimiento de la denuncia al Seprona, momento en el que se comunicó al consistorio de Gilet que no podía continuar con el cableado, que a mediodía de ayer aún no se había acabado de retirar, según confirmaban desde la conselleria. «Quedan algunos metros», aseveraba Marzo.

SIN COBERTURA EN GILET

El Ayuntamiento de Gilet pidió una licencia de ocupación, avanzándose a la ejecución de la canalización sin tener la resolución favorable. Un primer error, según Marzo, que además reclama «más sensibilidad ambiental tratándose de un parque natural» e insiste en la necesaria «tutela» de Medio Ambiente.

La primera autoridad local, Salva Costa, incidía ayer en que se buscaba atender la petición de los vecinos, que llevan mucho tiempo sin cobertura de telefonía móvil desde que desmontaron la antena de la urbanización La Paz tras una sentencia judicial. Una nueva antena en la urbanización Balcón de la Peña también fue desestimada por Medio Ambiente más tarde, al pretender instalarse en una zona de afección del parque natural, por lo que el informe emitido por los técnicos fue negativo.

Zanja abierta con el cableado al aire

Tras paralizar las obras, el Ayuntamiento de Gilet ha procedido a retirar los cables, aunque a mediodía de ayer aún quedaban algunos metros, según conselleria. En la imagen se aprecia cómo el cable discurría junto a la tubería del agua, lo que aumentaba notablemente el riesgo.

El Seprona será ahora quien lleve a cabo la investigación que determine el posible expediente sancionador, independientemente de lo que resuelva la dirección territorial sobre la petición del Ayuntamiento de Gilet. Aunque el alcalde esgrimía ayer que las obras se han llevado a cabo en una parcela municipal, Marzo recuerda que se está dentro de la afectación del parque natural, se trate o no de una zona de protección especial.

Cabe recordar, además, que el peligro de incendio acecha siempre sobre un paraje muy castigado en los últimos años y que el pasado fin de semana sufrió un pequeño conato en las inmediaciones de la urbanización Monte Picayo, en Puçol, sofocado al poco tiempo.