La Junta Electoral ha instado al Ayuntamiento de Quartell a aplazar el referéndum previsto este domingo para permitir a los ciudadanos elegir el nombre de la vía que sustituirá la denominación de General Abriat, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica.
La medida ha cogido por sorpresa al alcalde Pere Campos, que aseguraba ayer que pensaba presentar alegaciones y esperar hasta mañana para ver si, finalmente, puede hacerse el domingo con el visto bueno de la Junta Electoral pues, de lo contrario, acataría su negativa.
El referéndum era el tramo final de un proceso de participación ciudadana que comenzó el pasado 2016 con las pautas definidas por la administración central y autonómica para la realización de una votación como ésta. «Hemos tenido que desarrollar un reglamento puesto que es la primera vez en la historia de Quartell que se desarrolla un proceso participativo de este tipo. El objetivo no es otro que cumplir con la ley de memoria histórica y retirar símbolos o nomenclaturas referentes al régimen franquista» afirmaba el alcalde, Pere Campos tras reconocer que la medida se podía haber aprobado por decreto o en el pleno, pero se quiso dar participación a los vecinos.
La vía que une el Molí Nou o el Llavaner del municipio con el centro contaba hasta el momento con la denominación «General Abriat». La idea era que a partir de la semana próxima esta vía pudiera denominarse Carrer del Carme; Carrer de la Vall de Segó o Carrer Sistar. Ahora, en cambio, la votación queda pendiente de si prosperan las alegaciones o no.
Las posibilidades que se abrieron sobre el nuevo nombre se consensuaron en asamblea de participación ciudadana de ahí que se opte por la denominación anterior e histórica según la cual era Carrer del Carmen, el testigo de dicha nomenclatura se mantiene en la parte exterior del Molí Nou que cuenta con una capilla dedicada a la Virgen del Carmen. La posibilidad del Sistar viene por proximidad a la ruta del agua, mientras que la Vall de Segó pretende recuperar el valor de la subcomarca.
