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Trimestre laboral negro en la comarca

El paro aumentó los primeros tres meses del año y bajaron tanto la contratación como las altas en la Seguridad Social

Trimestre laboral negro en la comarca

El primer trimestre del año es tradicionalmente malo para el empleo en El Camp de Morvedre, aunque en 2019 esta tendencia se ha agudizado al subir el paro y bajar tanto las afiliaciones a la Seguridad Social como la contratación en magnitudes superiores a las registradas en los últimos ejercicios.

Y es que en este periodo se destruyeron 249 puestos de trabajo hasta quedarse en 21.951 ocupados en la comarca, se incrementó la cola del paro en 279 personas hasta alcanzar las 6.161 en busca activa de empleo y disminuyó el número de contratos en 1.272 con respecto a 2018, al firmarse 7.658 en lo que va de año. Estos dos últimos indicadores son los peores desde 2016, según los datos del Servici Valencià d'Ocupació i Formació (Labora).

En las altas a la Seguridad Social, que los agentes sociales coinciden en señalar como la variable más significativa a la hora de realizar una radiografía laboral, se resintió especialmente el sector agrario, ya que la finalización de muchos contratos se tradujo durante el primer trimestre de este año en la caída del 18 % en las afiliaciones. El régimen general también sufrió un retroceso, mientras que los autónomos en la comarca se incrementaron en más de una veintena desde principios de enero hasta finales de marzo.

Por municipios, los más marcados por la citricultura fueron los peor parados, especialmente Benavites, Quart de les Valls y Faura, mientras que Canet d'En Berenguer y Albalat dels Tarongers superaron este primer trimestre con más trabajadores que a finales de 2018.

En lo referente al paro, el municipio más afectado por la subida es Sagunt, que concentra 259 de los 279 nuevos desempleados en la comarca hasta rozar los 5.000. En el conjunto de El Camp de Morvedre resulta significativa la mayoría femenina, casi el 60 %,en la cola del desempleo.

Otro punto de preocupación es el número de contratos firmados en este primer trimestre, que fueron un 14,2 % menos que un año antes. A esta circunstancia se suma la ya habitual precariedad, ya que apenas un 7,9 % fue de carácter indefinido.

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