La Generalitat Valenciana sigue comprometida en la aceleración de todos los trámites para que Parc Sagunt II sea una realidad más pronto que tarde. Esta voluntad se evidencia en la evaluación ambiental que el departamento de Obras Públicas ha puesto en marcha y que ya ha superado su primer hito con la redacción de los documentos con la propuesta inicial de desarrollo, así como las soluciones para mejorar los accesos tantos viarios como por tren.
Mientras el departamento autonómico sigue a la espera de que todos los organismos consultados presenten sus informes, los que ya lo han hecho a lo largo de las últimas semanas son la Agencia Valenciana de Seguridad y Emergencias, las subdirecciones generales de Cambio Climático y Ordenación del Territorio, la Autoridad Portuaria de Valencia, el Ministerio de Fomento, los Ayuntamientos de Sagunt y Puçol, Acció Ecologista Agró y la Diputación de València.
Estos escritos toman posición, que en el caso del consistorio saguntino es contraria por varios aspectos, frente a las opciones que se barajan desde Obras Públicas para dar solución a los retos que tiene por delante para el desarrollo de una zona con 6,6 millones de m2, que actualmente están catalogados como suelo no urbanizable común y donde se debe contemplar la construcción del enlace ferroviario entre el Corredor Mediterráneo y el puerto comercial de Sagunt.
Sobre esta obra, de la que recientemente se aprobó de forma provisional el proyecto de ejecución con un presupuesto de 40 millones de euros, los planes para Parc Sagunt II consideran incluso que no se ejecute en su totalidad, sino que la conexión con el tramo València-Castelló se aproveche también para unir estas vías con las que utiliza ArcelorMittal.
Acceso feroviario al puerto
Este estudio también prevé, «si el mercado la demanda», una terminal de transporte de mercancías en el ámbito del futuro polígono industrial. La opción propuesta desde Obras Públicas, que toma posición por ubicarla en la zona este junto a Parc Sagunt I, destaca porque «reduce costes», al evitar la ejecución «de grandes viaductos de cruce sobre las infraestructuras existentes o en planeamiento».
Más significativa resulta la solución aportada por estos estudios a la accesibilidad viaria, una faceta que todavía no está resuelta para Parc Sagunt I. En este aspecto, el plan especial recoge una serie de entradas y salidas a la CV-309, la conocida como carretera de la IV Planta, y propone como alternativa a ejecutar un viaducto de paso del ramal procedente de Barcelona por la A-7 hacia la CV-309, lo que implica «un mayor coste, que previsiblemente quedará compensado por la menor longitud del total de ramales a construir».
Mientras esta tramitación apenas transita por el segundo de los 10 pasos contemplados antes de tener la documentación lista, lo que la Generalitat ya ha definido es la reserva de casi 3 millones de m2 para la instalación de empresas logísticas e industriales, una disponibilidad que a medio y largo plazo, cuando Parc Sagunt se colmate, permitirá dar otro impulso a la economía comarcal.
