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Aumento de la demanda

Parc Sagunt pasa en 2 años de 170.000 m2 ocupados a 1,4 millones vendidos

El polígono todavía tiene disponible más de una quincena de pequeñas parcelas industriales, terciarias y logística, que suman 400.000 m2

Nave que construye Importaco en una parcela de 50.000 m2. tortajada

«Todo el mundo viene creyendo que no nos queda espacio, pero todavía tenemos 400.000 m(2) por vender en parcelas pequeñas». Así resume la consejera delegada de Parc Sagunt y secretaria autonómica de Economía Sostenible, Sectores Productivos y Comercio en funciones, Blanca Marín, la situación que vive el polígono, que en los dos últimos años y con la «suerte» de la llegada de Mercadona ha emprendido el despegue definitivo que se auguraba desde hace más de 15 años.

Así, el parque que iba a crear más 25.000 empleos apenas albergó durante su primera década a cuatro empresas, Jofemesa, Zuvamesa, Inlet y Dismor, que ocupaban 170.363 m(2) de los más de 1,8 millones disponibles, un 9,2 %. A día de hoy y con otro proceso de comercialización abierto hasta el 11 de junio, Parc Sagunt tiene vendidas 35 parcelas que superan los 1,4 millones de m(2), con Crown ya en marcha sobre casi 75.000 m(2), aunque todavía ofrece más de una quincena de solares desde los 6.500 m(2) hasta los 57.800 m(2).

Los precios medios, que quedarán congelados en las dos comercializaciones todavía programadas para este 2019, alcanzan los 112 €/m(2) en el caso de los terrenos industriales, los 145 €/m(2) para los terciarios y los 79 €/m(2) para el solar de uso logístico que queda detrás de Mercadona. Marín apunta en palabras a Levante-EMV que «el problema es que se trata de parcelas pequeñas, para las que hay más oferta en la Comunitat Valenciana». En cualquier caso, la consejera delegada de Parc Sagunt defiende que «las nuestras son las mejores».

Para llegar esta situación, los responsables del polígono se han encontrado con múltiples obstáculos a lo largo de los últimos años. La socialista admite que «además de que todo estaba paralizado, el mayor problema que nos encontramos al llegar fue que había muchas adjudicaciones o reservas de parcelas previas a la crisis que estaban pendientes de resolver». Así y con el principal interés de «reactivar el parque con generación de actividad productivo y empleo, intentamos llegar a acuerdos con los parcelistas para liberar los solares más grandes sin tener que devolverles el dinero».

Solución judicial

En algunos casos, la solución tuvo que pasar por la vía judicial, pero en la mayoría se autorizó la reventa de la parcela siempre con la condición de que «el precio máximo fuera el mismo que el de adquisición para evitar maniobras especulativas», puntualiza Marín. Así sucedió con la compra por parte de Tempe de los 279.000 m(2) junto al centro logístico de Mercadona, que en un principio se adjudicó a la Autoridad Portuaria de Valencia por más de 30 millones de euros.

Blanca Marín también defiende que «desde el principio tuvimos claro que nuestra intención con Parc Sagunt no era ganar dinero». Así, otra de las medidas que se demostró eficaz fue la revisión de precios, que el socio estatal en el polígono siempre había bloqueado. Una acción comercial «decidida», la planificación anual de la venta de parcelas en varias convocatorias y el efecto llamada que provocó que Mercadona se fijara en Parc Sagunt han sido otros condicionantes para atraer inversiones.

En cuanto al trato con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que participa en el parque junto a la Generalitat, la socialista señala que «tuvimos diferencias de criterio en algunas ocasiones, pero la relación ha ido mejorando, después de que se hayan dado cuenta del éxito de Parc Sagunt a diferencia de otras áreas que tiene en España».

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