El pionero programa de Formación Profesional Dual que está desarrollando en Sagunt la empresa ThyssenKrupp Galmed, con tasas de inserción laboral del 100%, es un modelo a tener en cuenta tanto para la política local como para la europea. Al menos, así lo apuntaba ayer a Levante-EMV el candidato socialista a la alcaldía de Sagunt, Darío Moreno, después de visitar la planta y su centro de formación junto a la eurodiputada socialista Inmaculada Rodríguez Piñero, que ahora opta a la reelección, y con el Secretario Autonómico de Educación e Innovación, en funciones, Miguel Soler.

«Este tipo de formación, en el que los alumnos salen con la titulación española y alemana, facilita la inserción en el mercado laboral de los estudiantes al combinar las acciones tradicionales en los centros de estudios con la cualificación dentro de las empresas. Es muy interesante y entronca con nuestra apuesta por la industria y por una formación adecuada a ella», decía Moreno tras una visita a la que también se sumó la presidenta de la asociación comarcal de empresarios, Cristina Plumed.

Los socialistas también recordaron su apuesta por unir Sagunt a la llamada Xarxa FP, una iniciativa europea con presencia en 33 ciudades repartidas en 15 países, que fomenta la movilidad y la innovación de los estudiantes de Formación Profesional europeos.

Ya por la tarde Inmaculada Piñero y Darío Moreno mantuvieron una reunión con representantes del sector campo saguntino en el Consell Agrari. Allí, Piñero explicó las estrategias del PSOE para influir en la política agraria europea y recogió las inquietudes del sector para trasladarlas al europarlamento. Darío Moreno, por su parte, explicó a los asistentes los principales puntos del programa del PSOE para el sector citrícola, que incluye acciones como la modernización del campo, y un cambio de modelo que lleve a la producción sostenible, ecológica y de residuo cero, valores apreciados por los mercados internacionales y que, unido a la calidad del producto saguntino, servirán para crear una marca citrícola propia que permita abrir mercado para los productos de la ciudad.

Además su programa incluye colaborar con universidades e institutos de investigación para el desarrollo de nuevas especies agrícolas, adaptadas al cambio climático, así como de mejora de la competitividad. Una política para lograr la recuperación de tierras abandonadas, así como una reactivación del Consell Agrari para que recupere las necesidades del municipio y convertirlo en un co-creador del desarrollo agrícola. «Los problemas de la agricultura han sido uno de los más importantes de estos años. Es un sector que durante años ha sostenido a toda la Comunitat Valenciana. Los políticos tenemos una deuda con el campo valenciano, y tenemos que asegurar las condiciones económicas imprescindibles para asegurar no sólo la supervivencia del campo valenciano, sino que pueda generar empleo de calidad».