El Ayuntamiento de Faura controlará la presencia de gatos en las zonas urbanas con el protocolo CES, que se basa en la captura, esterilización y suelta de los animales. El objetivo de este plan, que ha sido aprobado en junta de gobierno y incluye la creación de un censo de voluntarios, es minimizar las molestias al vecindario de las colonias felinas, reducir los riesgos sanitarios, evitar la superpoblación y mejorar la calidad de vida de los animales. En definitiva, que la presencia de gatos en el entorno urbano se desarrolle de una manera armónica entre el bienestar animal y la convivencia ciudadana, según fuentes municipales.

El protocolo CES es la solución avalada por numerosos trabajos de investigación y supone una buena política de control de la población felina, desde el punto de vista de la salud pública y del bienestar del animal, añaden desde el Ayuntamiento de Faura.

La propuesta vino motivada por la detección de una mayor presencia de estos animales en ciertas zonas del pueblo, como por ejemplo el parque de La Canaleta, el de La Rodana y la plaza de Almorig. En cualquier caso, el consistorio ha tenido en cuenta a la hora de proponer las acciones que las colonias felinas son un factor positivo en el entorno urbano, dado que favorecen el control de plagas de roedores o insectos.

Las poblaciones de gatos registradas en el programa estarán protegidas y controladas por el ayuntamiento, por el que se pedirá a la ciudadanía una actitud de respeto hacia los animales, evitando molestarlos. Además, se solicitará que no les suministran ningún alimento.

Otro paso será la creación de un cuerpo de voluntarios. Las personas interesadas podrán cuidar de los miembros de estas colonias y participar en el desarrollo del protocolo CES, trabajando de manera altruista para proteger los animales y contribuyendo a su bienestar, concluyen desde Faura.