El Fertiberia BM Puerto está a caballo entre la gloriosa temporada del ascenso a Asobal y la cruda realidad que supone volver a la máxima categoría con las mismas apreturas económicas. En busca de recuperar parte de los 300.000 euros perdidos entre los presupuestos del primer regreso a Asobal hace casi 10 años y de la pasada campaña, los rojiblancos celebran este viernes (19 horas en el Casal Jove del Port de Sagunt) su tradicional gala de fin de temporada con el lema «Volvemos», mientras tratan de cerrar una plantilla competitiva que permita prolongar el sueño de la División de Honor.
En esta última categoría, la directiva encabezada por Juanjo Bataller tiene todavía que cerrar un jugador de primera línea, un portero y un pivote. En el primer caso, el club no descarta la renovación de Jaka Spiljak, aunque también se sondea el mercado después de que el eslovaco no haya respondido a la oferta de renovación. Como recambio de Bruixola, Juan Carlos Chueca está pendiente de confirmar si puede compatibilizar sus estudios con la condición de segundo portero del Fertiberia, mientras que en el pivote hay negociaciones avanzadas, que todavía hay que oficializar.
Y ahí se quedarían las herramientas puestas a disposición de Vicent Nogués para alcanzar la permanencia, siempre que no aparezca una nueva fuente de ingresos que permita pensar en otro fichaje.
