La Patrulla Animal de les Valls insta a la mancomunidad y a los consistorios de la subcomarca a trabajar en defensa de los animales de compañía en peligro. «Creemos firmemente en la necesidad de cambiar el convenio que rige el tratamiento de los animales perdidos, extraviados o expuestos a cualquier peligro», señalan. Este colectivo, conformado por personas comprometidas con el futuro del planeta, ha dado su primer paso ante las corporaciones y la mancomunidad con un encuentro del que todos salieron satisfechos y dispuestos a avanzar en la educación cívica y la convivencia.

El plan de acción de este grupo animalista pasa por la creación de un plan de colonias felinas. Con la llegada de la primavera, en múltiples espacios de los cinco municipios han proliferado los gatos y el control propuesto pasa por la esterilización y la alimentación. Se trata de una acción que requiere una mínima dotación económica, de ahí que la Patrulla Animal se haya reunido con los responsables políticos de la subcomarca para contrastar posiciones. Por el momento, la conformación de las colonias avanza y será esta nueva asociación la encargada de controlar los censos de animales, así como de garantizar sus curas.

Por otra parte, la creación de un espacio de bienestar animal en los pueblos garantizaría la protección de las mascotas perdidas o abandonadas. En este sentido, los vecinos de les Valls implicados en la Patrulla Animal han instado a los ediles a habilitar un espacio donde dejar a los animales identificados a la espera de su recogida por parte de su propietario. Este colectivo se ha comprometido a alimentar y cuidar de los animales mientras sea necesario y posteriormente repercutirá el gasto a sus propietarios; no obstante requieren como paso previo que los ayuntamientos habiliten estos espacios.

La importancia de poder identificar a los animales pasa porque cada municipio tenga un lector de chip. De ahí que la Patrulla Animal, que cuenta con uno, haya instado a los municipios a tener el suyo. En cualquier caso y si el animal encontrado no pueda ser identificado, esta patrulla apuesta por trabajar en su adopción.

En este sentido, la premisa que los vecinos de les Valls han presentado a sus políticos pasa porque «la perrera mata, la protectora cura, esteriliza y trabaja por la adopción», de ahí que el nuevo colectivo haya solicitado también un lugar para poder cuidar a los animales abandonados sin identificación. «Si la Mancomunitat de les Valls nos cede un local para tener los animales sin identificador, los beneficios serían no solo económicos, sino también éticos, ya que, transcurridos tres meses, el animal podría ser dado en adopción, sin que los municipios se vean obligados a pagar la protectora. Queremos que la mancomunidad sea un ejemplo de convivencia; una apuesta ética y cívica en defensa de los animales. De ahí que hagamos un llamamiento a todos los vecinos de les Valls que quieran unirse al grupo», añade Laura Pedrós desde el colectivo.